Inglaterra, que iniciará un desconfinamiento progresivo el próximo 2 de diciembre, tiene reservadas 100 millones de dosis de la vacuna elaborada por el laboratorio británico AstraZeneca.
Los estadios de Inglaterra podrán volver a recibir hasta un máximo de 4.000 espectadores tras el fin del confinamiento el 2 de diciembre, que dará paso a restricciones locales y un programa masivo de tests a la espera de poder iniciar la vacunación.
"Hemos girado una esquina y se vislumbra la vía de salida", pero "debemos resistir contra el virus hasta que las pruebas y las vacunas vengan a nuestro rescate y reduzcan la necesidad de restricciones", afirmó el primer ministro, Boris Johnson, al anunciar su plan para desmantelar el segundo confinamiento.
Iniciado el 5 de noviembre, este ha dado resultados: "el número de nuevos casos se está desacelerando", afirmó.
Y se levantará, como estaba previsto, el 2 de diciembre para dar paso a un sistema de restricciones locales, explicó por videoconferencia desde Downing Street donde se encuentra en cuarentena tras haber estado en contacto con un diputado que fue diagnosticado con covid-19.
Con más de 55.000 muertes confirmadas, el Reino Unido es el país más golpeado por el coronavirus en Europa y aunque quiere impulsar su ya muy castigada economía en las semanas previas a Navidad no todos los comercios, bares y restaurantes podrán volver a abrir en Inglaterra.
El nuevo sistema de restricciones basado en tres niveles reforzará las medidas establecidas antes de este segundo confinamiento y más zonas deberían entrar en un nivel elevado aunque no se conocerá hasta el jueves dónde se sitúa cada quien.
En el nivel de alerta 1 se instará a los británicos a trabajar desde casa. En el 2 permanecerán cerrados los bares y pubs que no sirvan comidas. Y en el 3 no podrán abrir los hoteles y los restaurante solo podrán servir comidas para llevar.
Del mismo modo, tras muchos meses jugando a puerta cerrada, los eventos deportivos -así como las actuaciones en vivo- podrán volver a recibir espectadores, pero con un límite de entre 1.000 y 4.000 personas y solo en las zonas del país donde los contagios sean más bajos.
Tres de los grandes clubs de la Premier League -Liverpool, Manchester City y Manchester United- se encontraban en zona de alerta "muy alta" antes del confinamiento y se desconoce dónde se encontrarán después.
Además el gobierno solo permitirá espectadores locales, para evitar el desplazamiento de aficionados por todo el país.
Tests masivos y vacunas
Todo esto tiene un objetivo: permitir que durante unos días en torno a las navidades las restricciones puedan relajarse para que las familias se vean, aunque con prudencia.
"No puedo decir que la Navidad será normal este año, pero en un período de adversidad, el tiempo que se pasa con los seres queridos es aún más valioso", afirmó Johnson.
Así, las cuatro naciones que forman el país -Inglaterra, Escocia, Gales e Irlanda del Norte- buscan coordinar sus políticas para que las familias puedan viajar en ese periodo.
El primer ministro conservador se congratuló también de los "avances científicos" que permiten vislumbrar esa luz al final del túnel en los próximos meses.
El primero es el anuncio hecho por la mañana por el laboratorio británico AstraZeneca sobre la alta eficacia de la vacuna de covid-19 que desarrolla con la Universidad de Oxford: 70% de media y en algunos casos hasta el 90%.
El Reino Unido, que ha apostado muy fuerte por este proyecto, tiene reservadas 100 millones de dosis de esta vacuna que, según el director ejecutivo de AstraZeneca, solicitará rápidamente la aprobación de las autoridades sanitarias.
Si logra la luz verde a tiempo, Londres quiere empezar a distribuirla en diciembre aunque reconoce que el grueso de la vacunación se realizaría entre enero y marzo.
El desconfinamiento irá además acompañado de un programa de detección rápida y masiva de la población en las zonas de alerta "muy alta", siguiendo el ejemplo de un experimento llevado a cabo en Liverpool, en el noroeste de Inglaterra.
Desplegado progresivamente, este sistema tiene como objetivo final que los contactos de un caso positivo pueden ser sometidos a tests diarios en lugar de tener que permanecer 14 días en cuarentena. Y un cierto retorno a la normalidad a la espera de una vacunación masiva.