El popular cantautor hispano fue hincha del Alcoyano, de su ciudad natal, que el domingo lo homenajeó en su cancha. Además, escribió el himno del Bujalance, club de fútbol sala.
La partida de Camilo Sesto fue sentida en toda España. En especial en esas pequeñas ciudades, que el creador de "Jamás" puso en el mapa. Una especial unión entre el fútbol y la música, dos de las grandes pasiones que vivió a pleno el cantautor ibérico.
El niño Camilo Blanes sube al estadio El Collao para ver a su querido Alcoyano, hoy en la cuarta categoría hispana. Después de la pichanga en el recreo del Colegio Salesianos, el incipiente catautor se entusiasmaba con la pelota.
Así cuenta a La Cuarta Juan Serrano, actual timonel del CD Alcoyano, equipo del cual el artista era fanático.
"Los que somos de Alcoy nos apegamos a nuestras tradiciones. Somos hinchas de nuestro equipo y celebramos la fiesta de 'Moros y Cristianos'. Camilo era así. Hace tres años estuvo en nuestra ciudad, le dieron la medalla de oro y lo homenajearon en el Teatro Calderón. Vino al estadio, ahí recordó cuando venía de niño con sus amigos. Le regalamos una bufanda del club y cantó en la plaza de la ciudad. Llevaba muy en el corazón lo que se llama la 'Moral de Alcoyano', algo que nos hace conocidos en toda España", recuerda el emocionado mandamás del "El Deportivo".
Por eso el club no se quedó atrás en los homenajes: "En nuestro último partido, contra Saguntino, el domingo pasado, le dedicamos un minuto de silencio. Por los altavoces sonó la canción 'Mi corazón es de Alcoy'. Fue un momento emocionante. Esta ciudad está muy triste. Camilo me dijo alguna vez que quería descansar junto a sus padres y, según entendió, su restos llegarán a Alcoy".
Otro himno de Camilo
Pero Blanes escribió otro capítulo en su nexo con el fútbol, tras componer el himno del Bujalance, un modesto equipo de fútbol sala en Andalucía.
"Sabíamos que Camilo estaba mal de salud, pero no esperábamos este desenlace", dice a La Cuarta Miguel Pérez, ex timonel del equipo, quien además sostiene que "en 2006 le dijimos que hiciera la canción, pero no esperábamos que aceptara. Se demoró tres o cuatro meses. Para eso visitó constantemente a los jugadores para conocer la mística del equipo. El himno, hasta el día se toca antes de los partidos y en el descanso".
Sobre los futuros homenajes, Pérez anunció que "estamos hablando con el ayuntamiento. Habrá una calle con su nombre en Bujalance, porque él fue quien puso en el mapa a esta pequeña ciudad. Siempre dio mucho y nunca pidió nada. Cuando vino a presentar el himno, llegaron personas de toda Latinoamérica. Ahí pudimos ver en directo su fama. Estuvo más de tres horas firmando autógrafos. Nos dijo: 'nadie se puede ir con las manos vacías'. Eso refleja su grandeza".