Jorge Sampaoli es humillado tras dura caída de Argentina con Croacia

Ni en la peor de las pesadillas Jorge Sampaoli imaginó algo así. Tras dos partidos en el Mundial, Argentina aún no sabe de puntos, y si el 1-1 del debut frente a Islandia fue para meter la cabeza bajo tierra, el 3-0 que le propinó Croacia a la selección albiceleste es simplemente para salir arrancando.

La actuación de los trasandinos fue una vergüenza, y si bien gran parte de las críticas apuntan a la figura de Lionel Messi, los palos más duros se los llevó "Minimí", por hacer naufragar a un equipo que antes de la acción en Rusia, figuraba como uno de los favoritos para quedarse con la Copa del Mundo.

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Tras un primer tiempo que terminó igualado 0-0, las modificaciones tácticas de Sampaoli parecían dar resultados, pero tras el descanso todo se desmoronó.

Antes que arrancara la segunda etapa, el casildense parecía presagiar la pesadilla. Con los ojos llorosos y la mirada perdida, el DT se sentó en la banca, y sólo atinó a escuchar las palabras de su PF Jorge Desio, quien intentaba orientar a un entratega que estaba nublado.

A los 53' lo peor de todo. Willy Caballero erró un pase a Gabriel Mercado, y dejó servida la pelota para que Ante Rebic marcara el 1-0 con una volea perfecta. "Minimí" se tomó la pelada a dos manos, y en una decisión desesperada, mandó a la cancha a Gonzalo Higuaín en reemplazo de Sergio Aguero.

¿Y Messi? Nada, caminaba en la cancha con la cabeza gacha, y "Minimí" no tuvo la personalidad para sacarlo de la oncena y darle un nuevo aire a los albicelestes.

Quizás ahí estuvo el pero error de todos, seguir confiando en un jugador que ya en los himnos se mostró derrotado, y que como capitán del equipono fue capaz de levantar a sus compañeros, quienes sólo atinaron a mirar como Luka Modric (80') e Iván Rakitic (90') marcaron el 2-0 y 3-0 para firmar una humillación.

Apenas sonó el pitazo final, Sampaoli enfiló hacia el camarín, se dio un par de empujones con los guardias que no le daban la salida, mientras un grupo de hinchas argentinos lo insultaba y escupían por el semejante papelón.

"Sampaoli, botón, Sampaoli botón, sos un hijo de puta, la puta que te parió", cantaban los trasandinos, quien ven como Argentina tempranamente se comienza a despedir del Mundial.

"El plan del partido no resultó. Hay que esperar y apostar a la mínima posibilidad que queda", se sinceró Sampaoli tras el partido, apostando a obtener los tres puntos que quedan frente a Nigeria, y que la calculadora este de su lado en el encuentro que cerrará el grupo D entre Islandia y Croacia.

Sobre los errores individuales que marcaron el destino de la Albiceleste ayer en Nizhny, Sampaoli decidió respaldar a su arquero Willy Caballero, quien se comió enterito el 1-0 de los balcánicos.

"Yo soy el responsable de tomar las decisiones. No creo humano ni real achacarle la culpa a Caballero. Estaba muy esperanzado y tengo mucho dolor por la derrota. Seguramente no leí el partido como correspondía", sostuvo el DT, quien sobre la presentación de Lio Messi agregó que "como conductores, no encontramos el mejor equipo para que lo acompañe".

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