La prensa local hizo eco de un enfrentamiento en el vestuario. Al parecer, Neymar y Marquinhos se agarraron de las mechas con el asesor deportivo de los parisinos. El Bayern celebra de cara al martes…
Pasa hasta en los mejores clubes: Paris Saint-Germain viene de dos dolorosas derrotas en fila —ante el Olympique de Marsella de Alexis quedándose fuera de la Copa de Francia y ahora frente al Mónaco de Guillermo Maripán—, de modo que los ánimos no son los mejores… y justo en la antesala del que, tal vez, es el duelo más importante del presente ciclo: ante el Bayern Múnich en la Champions League.
A los malos resultados, además, se le suma las ausencias de Kylian Mbappé por lesión y de Lionel Messi por una sobrecarga muscular. En el caso del argentino, los franchutes cruzan los dedos para que llegue a la cita.
Pero todo siempre puede ser peor, dicen por ahí. Y en el caso de los parisinos, ahora L’Equipe se fue de tarro con una supuesta pelea entre algunos jugadores del plantel y el asesor deportivo Luis Campos. Para ser más claros, todo habría surgido luego del 1-3 que sufrieron ante el Mónaco el pasado sábado, cuando Campos acusó su “falta de agresividad”. Uf…
Y en un camarín de pesopesados como el del PSG, la respuesta era previsible: cayó como el ajo. Particularmente a dos futbolistas: Neymar y Marquinhos, referentes también de La Verdeamarela. De acuerdo a la publicación, ambos se le enfrentaron al asesor y protagonizaron un duro cruce en portugués.
Conflictos
Antes, detalla el medio, Marquinhos se había peleado también con Gianluigi Donnarumma, quien ignoró su instrucción de no saludar a los ultras parisinos que llegaron hasta Mónaco. Claro, el brasileño seguía con sangre en el ojo con los hinchas, que los habían apuntado por una supuesta falta de compromiso con la institución.
Y precisamente, para arreglar la mala onda con los fanáticos, Presnel Kimpembe se acercó a hablar con ellos y decirles que los necesitaban en este mal momento: “Los necesitamos el martes en el Parque de los Príncipes. Tenemos que estar unidos si queremos sacar esto adelante, a pesar de todo lo que se diga, a pesar de todo lo que esté pasando. Ese es el mensaje”, lanzó.
La cosa está peluda en París, y en Alemania, todo indica, ya se frotan las manos…