Gracias a un zurdazo de Óscar Opazo, la Roja igualó 1-1 con Estados Unidos y aumenta las dudas de cara a la cita de Brasil, donde defiende el "bi". Si bien mejoró su juego, le pena la falta de gol.
Reinaldo Rueda recién estaba decidiendo si se quedaba de pie o se sentaba en la banca, si saludaba a los hinchas que llegaron a Houston o si se ponía a pensar altiro en las preguntas sobre Marcelo Díaz, cuando un balde de agua helada le recorrió el cuerpo, tal como cuando escucha la frase "tenemos que hablar". ¿La razón? El gol de Christian Pulisic, que anticipaba otra jornada terrorífica para la Roja.
Es cierto, en los pleitos amistosos, como el de ayer frente a Estados Unidos, se permiten ciertas licencias, el entrenador puede experimentar con nuevas caras o acudir al "remember", como en el caso de Jara, pero el buen funcionamiento se tornaba imperioso, considerando que al salir a la cancha del BBVA Compass Stadium, restaban 80 días para la Copa América de Brasil.
¿Qué pasó, entonces, después del 1-0 local? ¿Pasó la "U" y les dijo que estaban pajaroneando? No, señor. La Selección se repuso rápidamente y, con gol de Óscar Opazo a los 8', igualó el marcador con un zurdazo cruzado, y a partir de ese instante la Roja cambió el chip y se vio superior. Cerró espacios, juntó líneas y tuvo la posesión de balón, aunque sin generar mayores ocasiones.
Sí, el déficit que sigue penando en Chile, que en la segunda etapa se fue apagando. "El primer tiempo fue de mucha presión, pero eso no se puede mantener todo el partido. Nos desgastamos y cedimos terreno, pero tampoco hubo llegadas claras de Estados Unidos", explicó Óscar Opazo, responsable de que hoy Rueda respire más tranquilo.
En cuanto a su performance, el lateral contó que "estoy contento por el debut, al entrar desde el principio te sientes más cómodo. Se me dio y gracias a Dios pude responder, pero aún hay cosas por mejorar, estamos en camino, hay tiempo. ¿Si me siento más cerca de la Copa? Nooo, esto es día a día", cerró Opazo, que vio desde la banca el último triunfo de la Roja: en noviembre de 2018 le ganó 4-1 a Honduras.
Otro experimento: Pavez agarró camiseta
Luego del partido con México, se especuló mucho con los cambios que haría el técnico Rueda y, tal como lo adelantó La Cuarta, la principal sorpresa estuvo en la incorporación de Esteban Pavez, quien acompañó a Arturo Vidal y Charles Aránguiz, los más talentosos de la Roja.
El albo fue de menos a más, y aprobó en líneas generales, sacándole ventaja, incluso, a Erick Pulgar. ¿Lo curioso? A los 27' cometió una ruda infracción, pero el juez se equivocó y amonestó al "Príncipe".
El novio de Becky G entró sin pijama, sin pijama...
Los carrerones de Baird, el oportunismo de Zardes, el gol de Pulisic... Sí, fueron los principales dolores de cabeza, pero al menos en el minuto 35' hubo un respiro: el autor del tanto local salió lesionado.
¿Y quién entró en su reemplazo? Sebastian Lletget, y altiro se escuchó "a mí me gustan mayores, de esos que llaman señores", pues es el novio de Becky G, y ya se especula con matrimonio.