Sólo se disputará el duelo pactado con Perú, el próximo 19 de noviembre, y la nómina de jugadores será integrada sólo por futbolistas que militan en el extranjero.
Para terminar de cortarse las venas, tras perder la final de la Libertadores, ayer la Anfp también confirmó que el amistoso con Bolivia se fue a las pailas por el estallido social.
"Hemos comunicado formalmente a la Federación boliviana, la situación es complicada en ambos países también, y quedamos de acuerdo en pactar el próximo amistoso con ellos respetando también el acuerdo que teníamos", dijo Sebastián Moreno, jefe de la Anfp.
De esta manera, el único partido que jugará la Roja será el del 19 de noviembre en Lima, al que Reinaldo Rueda sólo llevará astros "extranjeros" con la idea, según Moreno, de que los locales se queden a disputar la fecha del torneo nacional una vez que se reanude. Claro, si es que se reanuda.
La medida dejó contra las cuerdas a Rueda, pues el partido en Perú será el último que la Roja juegue antes del inicio de las eliminatorias a Catar, que largarán en marzo del 2020.
El colombiano esperaba foguear al equipo, pero por la revolución social los planes cambiaron.