El delantero nacional termina contrato a fin de año con el Atlético Mineiro, pero su alto sueldo complica a la dirigencia azul.
Esta temporada Universidad de Chile tuvo una notable mejora en su rendimiento, y faltando dos fechas para que se termine el torneo nacional los azules mantienen la ilusión de salir campeones. Con una clasificación a la Copa Libertadores paráctiante asegurada, el Bulla ya piensa en cómo reforzar el plantel para la próxima temporada.
Uno de los primeros nombres que se le vienen a la mente a los fanáticos y a la dirigencia de la U es el de Eduardo Vargas. El delantero además de sentirse representado con los colores del club, termina su contrato con el Atlético Mineiro de Brasil a final de año, por lo que podría ser el momento perfecto para ir a buscar a Turboman.
En la interna del club el atacante nacional es tema de conversación y se analizan las posibilidades de traerlo de regreso al equipo universitario. “Cualquier jugador que se interesa en venir, sabe bien lo que podemos hacer. Así nadie pierde tiempo. Y (con Vargas) siempre ha habido intereses en común”, le comentaron desde Azul Azul a El Mercurio.
Uno de los puntos a considerar en el fichaje de Turboman es su sueldo, ya que actualmente cobra alrededor de 130 millones de pesos por temporada, una cifra exorbitante para el fútbol criollo, pero están esperanzados de que se podría llegar a un acuerdo al igual que en el caso de Charles Aránguiz.
“Siempre es posible lograr acuerdos. No necesariamente es un tema de dinero”, añadieron desde el directorio de Universidad de Chile. Cuando se abra el mercado de pases de fin de año se espera que la U puje por Vargas, y por el momento son solo ilusiones.