El delantero espera poder recuperar el protagonismo en el cuadro cruzado. No suma minutos desde enero, cuando todavía era parte del Necaxa en México, pero en su casa lo esperan con los brazos abiertos.
Aunque en principio todo hacía pensar que Nicolás Castillo no volvería a la Universidad Católica en el corto plazo, en las últimas horas esa opción se reactivó y el delantero formado en la precordillera pegaría la vuelta para vivir su tercer ciclo en los cruzados.
El propio artillero había mencionado hace unos días en su cuenta de Instagram que el club de sus amores no lo quería, y buscaba opciones en el exterior. También se hablaba de un par de equipos interesados en el campeonato local. Pero lo cierto es que, tras la lesión de Cristian Cuevas, Católica se quedó sin mayores alternativas en el plano ofensivo, y aunque se habló inclusive de Niklas Castro como opción, la de Castillo estaba más a la mano.
Así las cosas, aparentemente bastó una llamada y ponerse de acuerdo. De hecho, según informó Al Aire Libre en Cooperativa, sólo restan los exámenes médicos para confirmar la noticia. En horas de este lunes, Castillo se sometería a los mismos, y de aprobar, se transformaría en el cuarto refuerzo cruzado de cara a la segunda parte de la temporada.
Castillo, recordemos, padeció una trombosis en su pierna cuando todavía defendía la camiseta de América de México, lesión que lo tuvo fuera de las canchas por un muy extenso período. Y a su regreso, claro, le costó. Apenas sumó minutos en el Juventude de Brasil y en el Necaxa, por lo que ahora, en el club de toda su vida, espera agarrar algo de continuidad. En particular, Castillo no juega desde el pasado mes de enero.
No la tendrá fácil, en todo caso. Su posición, de centrodelantero, está bien cubierta por Fernando Zampedri. Pero aun así, a sus 29 años, espera poder relanzar su carrera y alcanzar el buen nivel que mostró hace algunos años. En Católica, Castillo sumó dos campeonatos de Primera División, una Copa Chile y una Supercopa.