Tras su salida luego de la caída en la primera ronda para la Copa Sudamericana, el técnico realizó una autocrítica, pero también aseguró que “la rabia o las emociones” habrían “traicionado” al presidente del directorio de Cruzados.
El extécnico de la Universidad Católica, Nicolás Núñez, asumió en conversación con Radio ADN que su salida se concretó por los malos resultados y su propia responsabilidad en la conducción del equipo. Sin embargo, también disparó sus dardos contra Juan Tagle, presidente del directorio de la sociedad anónima Cruzados, asegurando que no se respetaron los acuerdos.
Todo lo anterior, según sus propias palabras, se generaron tras la derrota ante Coquimbo Unido, durante la primera ronda de la Copa Sudamericana.
“Estaba muy frustrado los primeros días. En mi caso, se agrega que tenía mucha ilusión, por mi conexión con la UC. Pensé que iba a tener un desarrollo y no se hizo. Lo principal es una autocrítica, parto con eso. Si no hubiese perdido el partido con Coquimbo, no hubiese salido. Es un dato súper claro y la responsabilidad es mía por no haber transmitido lo importante de ese partido”, recalcó el DT.
“Después del partido, hubo un quiebre con la dirigencia, principalmente, con Tagle. El encargado de prensa me dijo que Tagle quería hablar para decir que yo iba a estar en evaluación… Sentí que no cumplió ese acuerdo que estaba conversado, porque quizás su rabia o sus emociones lo traicionaron”, agregó Nuñez.
El técnico igualmente reconoció que la UC ha tenido el problema de no poder jugar en su propio estadio, ya que actualmente está en renovación, pero reconoció que esa situación no responde a su propia responsabilidad de no haber realizado mejor las cosas.
“En Magallanes, todos los errores tenían menos repercusión. Acá hay que ganar ayer, no mañana. Después, nos fuimos acostumbrando y matizando en esa salida de balón. Fuimos encontrando en el tiempo, pero hubo varios partidos en que no lo hicimos bien”, evaluó Núñez.
Tras su salido, el brasileño Tiago Nunes, con pasos por Gremio, Sporting Cristal y Botafogo, asumió la conducción del equipo cruzado.