El mal comportamiento de un grupo de hinchas ha complicado el inicio de temporada albo.
En el plano estrictamente futbolístico, Colo Colo ha tenido un comienzo a pedir de boca: eliminó al puntero del fútbol argentino para avanzar a la siguiente fase de Copa Libertadores, se ubica en el tercer lugar del torneo local y, salvo una catástrofe, cuando se completen los diez minutos y descuentos trasladará la Supercopa a sus vitrinas. La mano de Jorge Almirón se notó de entrada, y con Arturo Vidal liderando desde el medio, se ha visto en cancha a un cuadro sólido defensivamente, punzante en la presión y con varias herramientas para llegar al pórtico rival.
Ahora bien, el real problema del “Cacique” parece estar afuera.
Es allí, en las gradas, que un grupo menor ha causado incidentes en buena parte de sus compromisos: Montevideo, Viña del Mar, Mendoza y el Estadio Nacional los sufrieron. Por ellos es que cerca de 13 mil hinchas fueron castigados con quedarse afuera de los próximos cinco compromisos que el elenco albo oficie como local.
Pero eso no es todo, no.
Por si fuera poco, hace unas horas el periodista Coke Hevia hizo una denuncia a través de redes sociales, a unas horas del partido que enfrentará a Colo Colo y Sportivo Trinidense en Asunción:
“Otro tema a revisar son las entradas de cortesías. En el caso de Blanco y Negro hay funcionarios que vendieron sus cortesías para el partido con Godoy Cruz”.
Toda esta suma de cosas generó que para el Superclásico del domingo, Colo Colo apenas pueda albergar a 32 mil hinchas en el Monumental. Así lo confirmaron esta mañana las autoridades.
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