El jugador de la "U" abrió su corazón para relatar la partida de su viejo y su dolor de no estar presente en su funeral.
Tras la muerte de su abuelo y padre Walter Óscar, por el contagio de coronavirus, Walter Montillo rompió el silencio y se refirió a este crudo momento que golpeó con fuerza su corazón.
"Hace tiempo que estábamos distanciados con mi papá, cerca de seis años. El año pasado empezamos a hablar nuevamente, íbamos de a poco, estábamos ahí y pasó esto. Me golpeó lo de mi viejo, porque uno está lejos y no puede ayudar", señaló el jugador de la "U".
"Me hubiese gustado que hubiese sido de otra manera, haber arreglado todo antes, pero no tuvimos la chance. A veces la vida golpea, pero hay que seguir, ponerle el pecho. Está mi señora y mis hijos que necesitan que uno esté bien. Seguimos pasando el duelo, recordando a mi viejo en los momentos buenos y no cuando hubo problemas. Es la mejor manera de rememorarlo", agregó la "Ardilla".
Sobre la actual situación médica de su madre, que también se habló que estaba contagiada de Covid-19, Montillo relató: "Está aislada, pero no presenta ningún síntoma y se encuentra bien. Le harán otro test y esperamos que no arroje nada, porque si sale dos veces negativo le darán el alta. La acompaño por teléfono, es lo que me queda. Está con una de mis hermanas en Buenos Aires", sostuvo.
El retiro
El ex San Lorenzo y Tigre, también tuvo palabras para hablar de lo futbolístico y un posible retiro a fin de año.
"En noviembre evaluaré si estoy para seguir o para dar un paso al costado. Es una decisión familiar. Tengo 36 años y es muy difícil mantener un nivel competitivo en la posición en que juego. No me puedo sacar la edad, si bien puedo entrenar, el cuerpo comienza a jugar en contra. Pero quiero irme bien, siendo importante dentro de la cancha y ojalá siendo campeón. No quiero esperar que la gente diga 'no rinde porque está viejo'", cerro a El Mercurio.