Nacido en 1858, este italiano es considerado la última voz lírica "castrati". Apareció en una época en que esta operación ya estaba prohibida, quedaban pocos espacios en la música para incursionar. Sin embargo, durante años integró el coro de la Capilla Sixtina. Es el único de estos intérpretes del que hay registros en audio.
"El ángel de Roma". Así le decían. Él era Alessandro Moreschi, un hombre pequeño y regordete que nació el 11 de noviembre de 1858, en Monte Compatri, ubicada en una provincia perteneciente a los Estados Pontificios, pocos años antes de la unificación de Italia.
Moreschi es conocido por ser el último castrati, el ocaso de una lista de cantantes que fueron castrados cuando niños con el fin de que conservaran la agudeza de sus voces.
Fueron muy populares durante el siglo XVIII, especialmente en Italia, tierra en que surgieron verdaderos ídolos de la época como Carlo Broschi "Farinelli", Gaetano Majorano "Caffarelli" y Gasparo Pacchiaroti, quienes posiblemente no habrían alcanzado la fama que tuvieron si no los hubieran sometido a esta hoy erradicada técnica quirúrgica en la infancia.
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Carlo Broschi "Farinelli", considerado uno de los más grandes "castrati" de la época.[/caption]
La castración con fines musicales es una práctica que se encuentra documentada en las antiguas culturas Sumeria y en el Imperio Bizantino, donde estos cantantes fueron comunes hasta la caída de Constantinopla en 1204.
Pero cuando fue retomada tres siglos más tarde, no es demasiada la información que se tenga de esta brutal práctica en el ámbito artístico.
Un factor que habría sido clave para su resurgimiento fue la prohibición que hizo el papa Pablo IV: las mujeres no podían actuar en los escenarios de Roma. Por ello, debían ser hombres quienes cantaran y asumieran ese papel.
Con la unificación italiana en 1861, vino la prohibición de la castración con fines musicales. Con el tiempo, solo en templos como la Capilla Sixtina siguieron cantando los castrati. Pero ello solo duraría unas décadas, porque, en noviembre de 1903, el Papa Pío X puso fin a esta estirpe de voces.
Se podría decir que, ya en los inicios de su carrera, Moreschi era una rareza, una excepción.
Rumores de una operación
Cuando ya corría 1898, en el coro de la Capilla Sixtina, ya solo habían seis de estos cantantes. Y uno de ellos era Moreschi, quien es conocido por el único castrati que ha dejado grabaciones de voz en acción.
Hay distintas teorías de por qué, en tiempos que la castración iba en retirada, Moreschi había pasado por esa operación. Se dice que nació con una hernia inguinal que —según se creía en ese entonces— se podía curar siendo castrado.
También se ha dicho que el "Ángel de Roma" fue sometido a esta operación antes de que se prohibiera esta práctica. Algunos la ven como la explicación más creíble.
No era extraño que algunas familias recurrieran a esta operación pensando en el porvenir económico del clan.
Esta operación, conocida como orquidectomía, se realizaba entre los 8 y 12 años, antes de que las hormonas sexuales de la pubertad volvieran más grave la voz del joven.
A inicios de su carrera, Moreschi era solista en el Santuario de Madonna del Castagno, en Monte Compatri.
Luego de que su poblado de nacimiento lograra sortear una epidemia de cólera que azotó al país, algunos vecinos atribuyeron esa mejoría a la voz del joven Moreschi.
Fue en ese entonces cuando el excantante de la Capilla Sixtina, Nazareno Rosati, lo habría descubierto, para que luego fuera enviado a estudiar canto a la capital, Roma, con el compositor y organista Gaetano Capocci.
Esto fue alrededor de 1873, cuando ya estaba prohibida la castración por motivos musicales. El joven cantante dijo que él fue sometido a esta operación antes de esa fecha.
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Moreschi practicando en su juventud.[/caption]
La cima
Así, Moreschi se hizo el primer soprano del Coro Sixtino a sus 25 años. El director de la agrupación, Doménico Mustafá, notó que el joven cantante era el único que lograba llegar a las notas más altas de "Miserere" de Gregorio Allegri, una pieza clásica del canto gregoriano en Semana Santa.
Algunas biografías lo han descrito como un personaje presumido, caprichoso, al que le gustaba dar conciertos enfundado en una larga bufanda blanca.
Su fama era tal que, el 9 de agosto de 1900, cantó en el funeral del asesinado Rey Umberto I.
"La apariencia externa de Moreschi difiere poco de la habitual para un cantante. Tiene una estatura media o más bien pequeña. Su rostro simpático es completamente lampiño; su pecho es notablemente amplio y poderoso. Su voz al hablar tiene una calidad metálica, como un tenor de tesitura muy alta. Su voz y comportamiento causan una impresión juvenil, reforzada por su animada conversación, que se suma a la imagen totalmente encantadora que presenta el cantante".
Con esas palabras describió al Moreschi de 55 años el profesor de música austríaco, Franz Habock, en el libro Die Kastraten und ihre Gesangskunst (Los castrados y su arte vocal).
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"El Ángel de Roma" ya de adulto.[/caption]
Esos cantantes, a pesar de haber sido castrados, muchas veces mantenían vidas sexuales bastante activas (no podían tener hijos), aunque este no habría sido el caso de Moreschi.
Cómo era su voz
La voz castrati Moreschi es la única que ha dejado un testimonio grabado en audio.
En abril de 1902 se hizo la primera de sus grabaciones junto a otros integrantes del Coro Sixtino en el Vaticano. Dos años después se repitió la experiencia. Así, el cantante dejó 17 piezas en total, las que han sido llevadas al formato de CD.
Algunas de las canciones grabadas son "Petite Messe Solennelle" de Rossini; el "Ave María»"de Bach y Gounod, y "Ave Verum Corpus" de Mozart.
El cantante italiano ya tenía casi cincuenta años cuando se hicieron estos registros de audio. Se escucha un estilo sollozante, con algunas desafinaciones que mezclan con un sonido metálico, chirriante.
"Con todos sus defectos, era un cantante entrenado que no tenía problemas para subir a una B alta", escribió en 1984 el crítico musical Harold C. Schonberg, en The New York Times, quien agregó: "Era un sonido de mujer pero con una diferencia: algo más profundo, más completo, más rico. No ha habido un equivalente vocal exacto".
Moreschi se retiró de la música en 1913, cuando ya tenía cincuenta y cinco años.
Casi una décadas después, murió. Dicen que en soledad, a causa de una neumonía, el 21 de abril de 1922, probablemente sabiendo que era el último de una estirpe.
https://youtu.be/t6U8VZ6riNk
