"Mucho amor, mucho desamor, mucha plata": Protagonistas de Élite revelaron detalles de la nueva temporada

Un nuevo director llegó al exclusivo colegio Las Encinas. Se trata de Benjamín Blanco, un estricto empresario que entró a cambiar las reglas del juego en la institución, poniéndoles nuevos límites a esa juventud de hormonas arrebatadas.

Pero no vino solo, sino con sus tres hijos: Patrick, Mencía y Ari, quienes ingresaron para revolver el gallinero entre sus compañeros.

A Samuel, Rebeka, Guzmán, Ander, y Omar no les quedó otra que meterse en ese juego.

En conferencia de prensa, Carlos Montero, co-creador y guionista de la popular serie Élite, calificó esta cuarta entrega como "una de las mejores temporadas", la cual ya se encuentra con sus ocho capítulos disponibles en Netflix.

Manu Ríos, que interpreta a Patrick, se incorporó a esta nueva temporada de Élite. "Al principio lo viví con nervios, un poco preocupado por estar a la altura del listón que ya llevaba la serie y la trayectoria que tenía", contó. "Pero una vez dentro, ha sido un gustazo".

Para Martina Cariddi, quien hace a Mencía, fue una "locura total y mucho vértigo también", dijo. "Era la primera vez que afrontaba un proyecto tan grande como actriz"

Donde caben dos, caben tres

Patrick, quien tiempo atrás sufrió un accidente, al tiro se siente atraído por Ander (Arón Piper), que también arrastra un pasado similar y que ha consolidado su amor con Omar (Omar Ayuso).

Según Manu, "Patrick no entra con ninguna intención de destruir la relación que tienen Omar y Ander", explicó. "Simplemente la personalidad de Patrick es muy arrolladora y lo que se le mete en la cabeza, que en este caso es Ander, pues va por ello".

Y agregó: "Si descubre que hay una relación y tiene que entrar ahí, pues lo hace pero no con intención de romper nada, simplemente desde esa gana y ese deseo".

Sobre esa trama, Arón Piper, quien encarna a Ander, respaldó las palabras de su colega:

—Patrick no creo que llegué con la intención de romper nada ni de meterse en medio —dijo—. Es caprichoso pero sin maldad. Entonces va a tener buena acogida en el trío este.

—¿Dónde caben dos caben tres? —le preguntaron a Piper.

—Ya veremos, pero cada situación es diferente.

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Arón y Patrick.[/caption]

Una trama truculenta

Mencía es una adolescente que va contra las reglas, sobre todo contra la autoridad, especialmente la de su padre, Benjamín.

Para la actriz Martina Cariddi, esa forma de ser de su personaje esconde algo: "La necesidad de ser querida y aceptada por los demás", y luego reflexionó:

—Más que la necesidad de ser aceptada por la sociedad, lo que le pasa a Mencía es que tiene muchas barreras, miedos y heridas pasadas... Y al final eso hace que viva con una coraza que se ha creado de tía dura y que todo le da igual. Pero en realidad todo le afecta tanto que por eso tiene esta impulsividad que, de repente, se pira y hace daño a la gente, y arrolla con todo.

Y es que esta nueva estudiante entra a sacudir el corazón de Rebeka (Claudia Salas), quien viene de una dura desilusión amorosa por culpa de Samuel (Itzan Escamilla).

Sobre la relación que surge entre ambas, Claudia explicó:

—Tanto yo como mi compañera Martina siempre nos lo planteamos contarlo no desde el acontecimiento de estar con alguien de tu mismo sexo, sino que el conflicto principal fuera: "ya he sufrido antes y no quiere volver a sufrir con por amor, da igual que sea mujer o un chico". Creo que eso es súper necesario.

Eso la llevó a una reflexión sobre que "las dudas son compartidas", sin importar las orientaciones: "Cuando ya vienes de una herida o de algo que no está sanado del todo, y aparece una persona que te hace temblar todos los cimientos, pues no te queda otra que quitarte esas capas que te has construido por miedos, por inseguridad, para no volver a sufrir, y dejarte llevar".

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Mencía y Rebeka.[/caption]

Y eso es lo que le hace Mencía a Rebeka: "La coge por banda y no la deja escapatoria", contó Claudia. "Entonces en lo que queda otra que decir bueno, 'venga tía, ¿dónde voy?'. Eso trae cosas muy bonitas, pero otras tantas que ya se verán".

A Martina le cuesta poco meterse en problemas de alto calibre, de los cuales después no sabe cómo salir, por lo que ello resulta un enorme drama en la relación con su compañera.

—Me daba miedo una parte de mi trama —reveló Martina—, que ha sido un poco truculenta: saber de qué manera lo iba a afrontar yo, de qué manera explicar el personaje, cómo se iba a entender.

Un príncipe turbio

Poco después de la llegada de estos nuevos estudiantes, aparece uno más, que proviene de la realeza: el príncipe Philippe, del Principado de Triesen.

Él es un joven rodeado de privilegios y de guardaespaldas. Su ingreso a Las Encinas fue para alejarlo de algunos rumores en su contra, acusaciones que sus nuevos compañeros desconocen.

Desde un primer momento, su atención recae en Cayetana, la joven mujer que trabaja en el aseo del recinto, y que es amiga de los estudiantes protagonistas.

El interés es mutuo.

Georgina Amorós, quien interpreta a esta personaje, describió el vínculo que se genera con el príncipe en esta nueva temporada:

—Va a tener una nueva relación con Philipe, pues bastante tóxica —dijo—. Pero también tendrán momentos muy bonitos. Creo que ella está en un sitio muy diferente al de las otras temporadas, porque, con la muerte de Polo creo que entierra una parte suya que antes rechazaba completamente.

Sobre esa faceta pasada de Cayetana, dijo: "Esa parte la entierra, se crea una máscara y empieza esta temporada intentando aceptarse a ella misma".

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Cayetana y Philippe.[/caption]

En tanto, desde la otra vereda, Pol Granch, quien encarna a Philippe, tiene esperanza en que esa relación pueda prosperar a pesar del lado oscuro que tiene el príncipe.

—La mayor parte de la relación es muy real —dijo el actor—. Creo que en la relación es muy importante el término confianza, porque mi personaje, como está siempre rodeado de oro y en una burbuja, no sabe recibir un no por respuesta. Entonces como que llega a este colegio con el escudo puesto de príncipe y desconfianza frente a todo el mundo.

Ante ese escenario, destacó el papel que juega el personaje de Georgina: "Es la única que le muestra ese huequito de confianza y de acogida", dijo. "Así empieza y todo, y después se trunca un poco, pero como en muchas relaciones".

Granch también es uno de los protagonistas que ingresó esta temporada a Élite.

El actor expresó el sobresalto que le significó la primera vez que leyó el guión: "Tuve bastante infarto porque el personaje hace cosas que son bastante truculentas, turbias, que no por eso no se tienen que mostrar, que tienen que hacerse visibles y que están ahí, que existen".

Desde un lado más anecdótico, el actor dijo que también le costó trabajar su forma de hablar en la serie. "Poner el acento francés, eso me hizo mucha gracia y desde el principio es algo en lo que me quería meter", detalló. "Quería probar y quería ver cómo sonaba".

Para adolescentes y adultos

Uno de los guionistas de la serie también estuvo en la conferencia, Carlos Montero. El escritor dijo que, en esta cuarta temporada, "el reto más grande es encontrar el equilibrio entre los nuevos y los veteranos".

"Necesitábamos que los nuevos entrarán con muchísima fuerza, pero que no fagocitaran a los antiguos", detalló quien ya piensa en una quinta temporada de Élite.

Montero, que ya se encuentra pronto a cumplir 50 años, también fue consultado sobre la dificultad que le significa escribir series para un público joven:

—Si se escribe con honestidad, escribes sobre tus obsesiones, que son las de un señor de 49 años, aunque escriba para adolescentes. Creo que ahí está un poco el equilibrio.

El guionista reveló que hace mucho tiempo le aburrieron las series de adolescentes. Pero él siente que Élite funciona con otros códigos:

—Está escrita desde otro lado —dijo— . Creo que eso engancha a los jóvenes, porque no los estás tratando de tontos, y a los adultos porque se pueden sentir identificados en muchos de los problemas. Los adolescentes de Élite son los privilegiados que han llegado a la vida con muchas cosas ya hechas: tiene acceso a la cultura, a los medios... entonces, en ese sentido, son mucho más adultos que un chaval de 15 años.

Otro triángulo amoroso

Manu Ríos dijo que lo más le gustó de Patrick, es llegar al colegio con su papá (Benjamín) y sus hermanas (Mencía y Ari).

"Al final no es un personaje que entra por su cuenta y ya está, sino que comparte un background que tenemos; bueno, eso no se cuenta en esta temporada, pero está ahí a la hora de crear el personaje", dijo, porque, claro, esa familia comparte un doloroso pasado en torno a la madre.

Carla Díaz, quien interpreta a Ari, una chica inteligente y algo clasista, dijo lo que más le interesó de su papel: "La forma que tiene de gestionar tan mal las emociones me hace mucha gracia y me gusta mucho", dijo.

En esta temporada, Ari se involucra con Guzmán, quien ve cómo su pololeo con Nadia va a las pailas a causa de la distancia. Pero el personaje que interpreta Carla también se interesa por Samuel, otro de los estudiantes antiguos.

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Samuel y Guzmán.[/caption]

Itzan Escamilla es quien interpreta a Samuel, y también desmenuzó los pasos que sigue su personaje esta temporada:

—Samuel deja un poco atrás toda la mochila dramática que llevaba hasta ahora —relató— , y conoce a Ari, y entra en un conflicto porque se crea un triángulo amoroso entre ella, Guzmán y Samuel del que, bueno, poco a poco se irán colocando las cosas, y harán que se tambalee la relación entre Guzmán y Samuel, pero esa es una relación que está bastante consolidada. Pase lo que pase al final van a superarlo... Con Ari encuentra un nuevo amor, una nueva persona con la que descubrirse.

Todos esos nudos y enredos dan vida a la nueva temporada de Élite, la cual Claudia Salas (Rebeka) resumió así:

—Hay muchísimo amor del bueno, muy bonito y muy bien trabajado —dijo y luego agregó—: Hay mucho amor, mucho desamor, mucha trama, mucha plata...