No fue un camino fácil el que debió enfrentar el hombre de raíces asiáticas, quien, tras ser rechazado en Hollywood, viajó a Hong Kong para iniciar una carrera en el cine y las artes marciales.
Tiempo después, el mundo conocería a Lee Jun-fan como Bruce Lee, quien nació en noviembre de 1940 en San Francisco, California.
Su breve pero recordada carrera como estrella de cine y artes marciales dejaron una huella profunda en la cultura popular.
Sin embargo, su prematura muerte, con tan solo 32 años en julio de 1973, truncaron un legado que, como tantas partidas temprana, al mismo tiempo, solo agrandó su leyenda.
El documental Be Water, dirigido por Bao Nguyen y estrenado en 2020, se encuentra disponible en la plataforma de streaming Star+ y relata la faceta más íntima de Bruce Lee, cada paso de su vida.
Con una enorme cantidad de material de archivo cedido por la familia, la cinta cuenta su relato a través de los testimonios entregados por su pareja, Linda Lee Cadwell, su hija Shannon y amigos cercanos.
Si bien nació en suelo norteamericano, tras ser rechazado en Hollywood, el protagonista de Operación Dragón (1973) debió viajar hasta Hong Kong para convertirse en estrella de cine, en Asia primero, para luego regresar a Estados Unidos y conseguir convertirse en figura en una industria que, al menos hasta ese entonces, tenía personajes asiáticos basados en meros estereotipos.
Sobre su enigmática muerte, el documental no elude el tema, siendo un edema cerebral la causa oficial de su deceso. La pieza se da el gusto de descartar varias hipótesis, concretando así una historia llena de revelaciones inesperadas sobre el multifacético artista, en casi dos horas de película.