Felipe Reyes durante más de una década ha liderado a Prófugos, un tributo de Soda Stereo que logró la estatura para llenar escenarios como el Teatro Caupolicán o la Quinta Vergara. Pero en el camino hubo dificultades: el Gustavo Cerati nacional debió enfrentarse a su propio físico, la desmotivación y Charly Alberti, miembro fundador de los argentinos. Tras supuestas amenazas del baterista, anunciaron una gira de despedida que no se concretó. Luego acusó temas familiares y desilusión para dejar su lugar en la banda. Pero regresó y ahora preparan un show masivo en el Movistar Arena.
Parado frente a uno de los flippers de un videoclub en el litoral central estaba Felipe Reyes, entonces de 11 años, cuando una canción lo distrajo del juego. Ocurrió en algún momento de 1985: años donde los jóvenes lucían prendas amasadas, chaquetas con flecos y los raros peinados nuevos. Estaba de moda el new wave y el post punk pero también el rock latino, música que precisamente se había nutrido de esa estética británica.
Soda Stereo, para entonces, se planteaba como uno de los mayores exponentes de la movida. Apenas dos discos —Soda Stereo y Nada personal— le habían bastado para conversar con Virus, por ejemplo. A ellos escuchó ese día Reyes. Fue el comienzo de algo. Su mamá le regaló un cancionero de la banda, de tapa celeste, en papel roneo. A los 13 o 14 años solía divertirse guitarreando, como Gustavo Cerati, con una escoba. La presentación en Viña en 1987 se le grabó en la cabeza.
A esas alturas, tenía una certeza: no podía despegarse de la banda.
Cuando cruzó la barrera de los 30 años, una noche, entre tragos, Felipe Reyes se animó a cantar las canciones de Soda Stereo con un amigo. Imitó, también, cada uno de los gestos que solía hacer Cerati. Era como si, durante años, sin prestar atención, Reyes hubiera estudiado a fondo al rockstar argentino. Pero lo que más impresionó a su amigo fue la voz. Se dieron cuenta de que su registro era idéntico.
Reyes, pronto se subió a algunos escenarios para probar suerte. Era 2008: en un boliche de Peñaflor los ovacionaron a él y a sus compañeros. Lo mismo les pasó en otros escenarios. Al poco rato habían logrado hacerse un nombre como tributo a los argentinos y llenar La Batuta. Se llamaron a sí mismos Prófugos:
"Prófugos, porque era un nombre corto…, Gustavo era tan sensual en esas cosas", blanqueó Reyes en una entrevista algunos más tarde, "entonces Prófugos significaba muchas cosas en cuanto al amor y era un buen nombre: pegaba y era una canción de Soda".
https://www.youtube.com/watch?v=545kit1PBpY
Después vinieron escenarios importantes, como el Teatro Caupolicán o el Movistar Arena. También en el extranjero. Pero el que recuerda con más cariño Felipe Reyes es el de la Quinta Vergara. Allí tocaron el 25 de noviembre de 2017. Fue como un sueño, le gusta repetir.
"Si hubiera hecho una carta gantt —también ha repetido más de una vez—, lo más probable es que no se hubiera cumplido nada de eso".
Pero el viaje inesperado de pronto enfrentaría un problema inesperado.
Es un delirio de condenados
En 2012 Prófugos era considerado el mejor grupo tributo a Soda Stereo en Chile, y para responder a ese cartel planearon su primera presentación conceptual: replicarían el emblemático Unplugged de MTV Comfort y música para volar de 1996.
Felipe Reyes entendió que ese era su momento. El de profesionalizar el espectáculo, pero también el de convertirse en el Cerati chileno. No bastaba con su voz calcada, los cuidados riffs de guitarra y su peinado ondulado. Por eso, la preparación del show incluyó un riguroso entrenamiento que le permitió bajar 20 kilos.
"Ya desde la época en que hicimos el Unplugged empezó a gestarse un grupo de asistentes permanentes a nuestros shows, que no son fans, porque Soda tiene fans y nosotros no —le decía a Culto de La Tercera en 2018—, pero sí gente que nos quiere como personas, que nos han visto evolucionar. En mi caso, a alguien que bajó de peso, que aprendió con el tiempo a cantar medianamente bien".
https://www.youtube.com/watch?v=Kn5KUz1RCoE
Ese mismo año, 2018, Felipe Reyes se sometió a una cirugía de nariz. Explicó en la misma entrevista, que lo hizo para acomodarse el maquillaje que usa en vivo y para que su aspecto fuera más agradable para el público.
No mencionó intenciones de conseguir un mayor parecido a Gustavo Cerati.
Sé que huyo porque amo
Un día de octubre de 2017 Charly Alberti, baterista y fundador de Soda Stereo, llamó personalmente a Felipe Reyes. En nueve años de presentaciones, el Cerati chileno podía presumir que compartió escenario con Fernando Nalé y Leo García, bajista y guitarrista de la etapa solista de Gustavo respectivamente, o con el cuarto Soda, como suelen llamar a Richard Coleman. Incluso, que en 2011 Lilian Clarke, madre de Cerati, lo recibió para acompañarlo en su visita al hospital donde estaba internado el músico. Pero no tenía relación con algún miembro original de la banda.
En su casa de San Vicente de Tagua Tagua, podemos imaginar que Reyes contestó con algo de incredulidad, que luego dio paso al nerviosismo propio de quien habla con un ídolo. Que tal vez le costaba hablar con normalidad. Pero apenas unos segundos más tarde, si hubo algo de eso, se acabó de golpe.
Alberti, explicó Reyes, lo llamó para decirles que terminaran con el tributo, que no podían seguir tocando sus canciones. El tono de la conversación lo desmoralizó:
"Si te amenazan con demandas y todo eso obvio que te desmotivas. ¿Cómo me va a motivar hacerle un tributo a alguien que no está de acuerdo? —dijo a La Tercera—, nosotros nunca pretendimos reemplazarlos, sólo traspasarle sus canciones a nuevas generaciones, y logramos convertirnos en un fenómeno".
También advirtió que un año antes, en 2016, Alberti ya le había amenazado a sus productores. Por eso, Felipe Reyes y el resto de la banda iniciaron una gira de despedida, que culminaría el 21 de diciembre de 2018 en el Movistar Arena.
Unos días después, el propio Charly Alberti desmintió a Reyes. Esto le dijo al portal argentino Silencio:
"En ningún momento hice ninguna demanda. Lo único que sí les pedimos a las bandas tributo es que no utilicen las imágenes o los logos, porque sobre eso no tienen autorización, nada más. Después, los temas los pueden tocar, la ley sólo les exige que paguen los derechos".
Y apuntó contra Reyes: "Eso habla de una persona muy fantasiosa en sus dichos. Hay cientos de bandas que están haciendo (tributos) y lo hacen de manera respetuosa. Ellos, por lo que tengo entendido, han pasado la línea y en algún momento el comentario fue ese: háganlo de manera respetuosa, nada más. Siempre genera algunas situaciones de prensa, pareciese que para victimizarse, porque la verdad desde nuestro lugar ni atención le prestamos".
La polémica llegó a oídos del hijo de Gustavo Cerati, Benito:
"A mí me re gusta que hayan bandas tributo a Soda porque los que vienen a hincharme las bolas a mí con ser como Soda los mando a escucharlos a ellos, es más fácil y no me joden tanto", soltó, mucho más resuelto.
https://www.youtube.com/watch?v=aJr4XxtVrhE
Como sea, la despedida de Prófugos no se produjo como tal. La banda continuó subiendo a escenarios, pero en la cabeza de Reyes no era lo mismo. De hecho, en abril del 2019 por "temas familiares y de desmotivación" anunció que daría un paso al costado e incluso presentó a su reemplazo: Ricardo Callealta.
"Decidí que es el momento de compartir más con mi familia y emprender nuevos rumbos y proyectos", le decía por esos días al diario pop.
Pero esa decisión duró menos de un mes. En mayo, después de volver a conversar con Charly Alberti, donde informó que limaron asperezas, Reyes se reintegró a la agrupación.
Siempre seremos Prófugos
"Muy felices de presentar nuestro nuevo show 'Gracias por venir' en el Movistar Arena", dice Felipe Reyes detrás de unos lentes de sol, sentado sobre unas escaleras, mientras apunta en tres ocasiones a la cámara. "El primer show masivo en el Movistar Arena. Las entradas ya están disponibles".
Así, con una breve grabación, Prófugos, que por estos días se presentará en el Teatro Provincial de Curicó, anunció su regreso a uno de los escenarios nacionales más importantes.
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La cita será el próximo viernes 12 de noviembre y, en sus palabras, prometen recorrer algunas de las giras más emblemáticas de Soda Stereo, como Dynamo, MTV Unplugged y Me verás volver. Además, incluirán un set de canciones de la encarnación solista de Gustavo.
Felipe Reyes postergó su vida en el campo para volver, los próximos días, sobre la piel de Cerati y enfundarse por unas cuantas horas la guitarra Jackson azul del ídolo argentino. Espera, esta vez sea alejado de las polémicas.
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Afiche del concierto.[/caption]
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