La leyenda de las artes marciales y estrella de cine solía consumir drogas duras, según se reveló en una serie de cartas escritas por él mismo.
El destacadísimo artista marcial, probablemente el más influyente, además de actor y cineasta, Bruce Lee, aparentemente vivía emparedado entre los excesos. Así se reveló a través de unas cartas que salieron hace poco a la luz y que habrían sido escritas de puño y letras por él mismo.
Se trata de más de 40 escritos dirigidos al también actor Robert Baker, quien al parecer oficiaba como una suerte de dealer.
Según consignó The Times, por ejemplo, en 1972 la estrella de cine le solicitó a Baker mediante una de las misivas que le consiguiera "una gran cantidad de cocaína".
En otro de los documentos, le explicaba que la cocaína precisamente podía serle de ayuda para terminar de darle forma a un personaje en el que trabajaba para una película:
"Estoy muy muy drogado, pero estoy trabajando en el próximo personaje. Un poco de coca podría ayudarme en la formación de lo que quiero crear", sostenía Lee.
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La leyenda de las artes marciales.[/caption]
Las peticiones de la leyenda
"Estoy planeando venir a Estados Unidos en tres o cuatro semanas. En cuanto a los productos, puedes enviarlos en un paquete dirigido al Sr. Wu Ngan en Golden Harvest Studio".
Con esas palabras, Bruce Lee le anunciaba a Robert Baker a fines de 1972, poco antes de su muerte, que requería de ciertas sustancias.
Y luego las enumeraba:
"La lista de productos puede ser (1) cocaína (en gran cantidad) (2) ácido (en cantidad justa) (3) Hash o hierba".
El contenido de esas cartas, halladas en un mercado de pulgas por un coleccionista anónimo, hoy supera los 200 mil dólares.
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El "Dragón".[/caption]
Cosas sagradas
Se sabe que el actor Steve McQueen fue el primero que de alguna manera introdujo a la leyenda de las artes marciales en las drogas. Él, por ejemplo, le ofreció su primer cigarrillo de marihuana.
Fue en los tiempos en que Lee oficiaba como maestro de artes marciales y le enseñaba tanto a McQueen como al director de cine Roman Polanski.
Lo que no se sabía, y así lo reveló el contenido de las misivas, fue que Baker era el dealer: el que le proporcionaba cocaína, ácido y marihuana a Lee. Sustancias a las que el artista marcial conocía como "cosas sagradas".
Así lo subrayó su biógrafo, Matthew Polly, quien durante más de una década dedicó su tiempo a realizar un centenar de entrevistas a familiares y amigos del fallecido actor.
"Si bien se rumoreaba durante mucho tiempo que Baker era el distribuidor de Bruce, muchos, incluido yo, asumían que se limitaba a la marihuana/ hachís", tuiteó Polly tras las revelaciones.
Y agregó: "Estas cartas confirman con gran detalle que era principalmente cocaína, y en cantidades suficientes para decir que Bruce tenía un hábito real".
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También fue una estrella de cine absoluta.[/caption]
Abuso del consumo
En un principio, en el intercambio epistolar, Lee y Baker utilizaban una suerte de código. Hablaban de "cosas" y "papel", aunque como se puede apreciar, con el paso del tiempo, perdieron ese cuidado.
Eso sí, en uno de los escritos, el artista marcial reconoció un "consumo excesivo" y planteó dejarlo. Las drogas estaban en contra de sus valores.
Pero en 1973, mientras se filmaba la exitosa Enter the Dragon en Hong Kong, fue su esposa, Linda, quien se encargó de escribir a Baker:
"500 dólares de C", le pidió Linda al actor, y añadió: "No te preocupes si Bruce usa la C, no se está excediendo".
Apenas un mes más tarde Lee sufrió una inflamación en el cerebro y convulsiones. Aunque se recuperó, en julio de 1973 falleció a la edad de apenas 32 años.
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Falleció el 20 de julio de 1973. Tenía 32 años.[/caption]
"La clave para entender la muerte de Bruce Lee es saber que se había desplomado 10 semanas antes y casi se murió de lo mismo", explicó su biógrafo en conversación con Fox News.
"El 10 de mayo de 1973 ingresó a un pequeño cuarto de doblaje en uno de los días más calurosos del mes y apagaron el aire acondicionado para no dañar el audio. Él inmediatamente se sobre-calentó y se empezó a marear", relató.
Y cerró: "A pesar de que salió de la sala igualmente se cayó al piso desplomado. Se levantó y cuando volvió a ingresar al cuarto caluroso se cayó nuevamente y empezó a convulsionar violentamente. Lo llevaron al hospital y los doctores sospecharon que tenía inflamación en el cerebro…, así que el primer episodio era igual a un golpe de calor".
Gran parte de las cartas de Lee, donde deja al descubierto su preferencia por las drogas duras, serán subastadas pronto en Dallas, Texas.
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