En septiembre del 2021 sacó su primer disco y, hace poco, anduvo de gira por México y España. Ahora, la cantante de 25 años debutará en el Teatro Caupolicán y ya tiene en la mira el Festival de Viña, mientras ya trabaja en un nuevo álbum. “Lo tengo muy planeado”, dice sobre su futuro al diario pop.
Trinidad Riveros, o Princesa Alba, quería seguir el ejemplo de grandes maestras del pop como Fergie, Christina Aguilera, Britney Spears y Dua Lipa. “Siempre estuvo la intención”, confiesa al diario pop.
Cuando sacó su primer álbum, besitos, cuídate, en septiembre del 2021, con sus once canciones, dejó algunos temitas en el tintero para tirarlos en una versión “deluxe” del álbum, en la que finalmente incluyó temas inéditos como “diario de vida”, “pa dejar de pensarme” y un remix junto a la española Paula Cendejas.
Antes de sacar la primera versión, tenía “muchos” temitas “flotando” a su alrededor, por lo que procedió a hacer una selección con un criterio “en verdad súper arbitrario”. Por lo tanto, simplemente se trataba de que “voy a elegir primero esta para después sacar el otro”, e incluso “dejar alguna que me encantan para después, para el deluxe”.
Así que todo era parte del plan, simplemente “estaba esperando el momento”, cuenta. “También quería cerrar el ciclo del besitos, cuídate, como estas canciones eran demos de ese disco, y ahora empezar con nuevas canciones y sonidos”.
Lecciones de un mal amor
—Una de las nuevas canciones es “diario de vida”... ¿Qué papel juega este en tu día a día?
—Uh, todo, es como mi terapia escribir en papel, es bacán; aparte me desconecto y pongo música. Hay veces que escribo todos los días, otras que escribo una o dos veces por semana. Es bacán tener esos registros. Tengo todos mis cuadernos en un cajón, de todos los años; si estoy nostálgica y quiero ir a un día en particular, como al cumpleaños de una amiga, puedo cachar qué estaba sintiendo.
Pero no solo eso:
—En términos de composición también me ayuda muchísimo, porque tomo literalmente las cosas que he ido sintiendo: emociones, palabras que después me ayudan a hacer una canción. Me parafraseo a veces.
Hace unas semanas, en conversación con el sitio mexicano Naufraghost, la artista contó sobre su disco: “Estuve en una relación tóxica y un poco también es el testimonio de salir de eso”.
—¿Qué lecciones sacas de ese pololeo?
—Creo que lo que saca el besitos, cuídate a relucir es dejar el amor romántico de lado, saber que finalmente la mejor polola que puede haber soy yo misma. Soy la mejor pareja que puedo tener, un poco porque siempre he estado pasando de relación en relación, de pololeo en pololeo, largos aparte. Encontrarme conmigo misma fue súper bonito y quería hacerle una oda a eso y las crónicas de estos dramas. Todavía me siento súper adolescente; era la primera vez que estaba soltera en mucho tiempo. Y está súper bonito eso: apoyarme en las amigas, en mi familia, en mí misma. Es terminar una relación, pero a pesar todo lo que pasó, todo lo tóxico que fue, terminar con felicidad porque sabes que se está abriendo y que estás viviendo un proceso de crecimiento personal.
—Tus canciones suelen ser autobiográficas... ¿Te da nervio mostrar esa intimidad?
—Por algo soy artista. Estoy un poquito acostumbrada a que se trance mi vida personal, pero no tengo rollo en ese sentido, porque lo bonito que me pasa es que muchas niñas y niños se sienten identificados con las letras, y me dicen como: “besitos, cuídate me ayudó para superar mi propio término”. Y a mí también me pasa que me sirve a mí. Hay veces en que me baja la nostalgia, o estoy en un bajoneo, y escucho una canción mía para recordarme qué es lo que sentía en ese momento. Es como yo misma hablándome en las canciones. Y sí, son súper autobiográficas y creo que tampoco podría escribir desde otra parte.
Los pendientes
Princesa Alba siente que “todas las cosas que manifiesto se logran”. Sin embargo, recién tiene 25 años y aún queda un largo trecho de sueños por cumplir.
—Ahora, ¿qué estás “manifestando” en tu vida para que se logre?
—Uy, mil... En mi diario de vida tengo miles de hitos que quiero lograr. Obviamente en mi lista hay cosas desde taparme una muela o tener un auto, hasta ir al Festival de Viña, ir a Coachella, sacar mi segundo disco, trabajar con tal productor. Le voy haciendo check a las cosas. Es bacán porque así también me voy ordenando en mi lista de prioridades y qué cosas tengo que hacer para llegar ahí.
—De todas las cosas que has “manifestado”, ¿cuál es la que más te sorprende?
—Mi carrera en general. Jamás pensé que iba a pasar todo este arrastre que he tenido, ganar premios, llegar a festivales. Yo partí, de verdad, desde una inocencia y un querer hacer música porque me gustaba, sin expectativas. Pasó que se hizo viral (“My only one”) y pasaron muchas cosas en el camino. Es como un sueño pero, a la vez, lo tenía pensado. Entonces no sé hasta qué punto fui yo o las circunstancias.
Debut en grande
La cantante ya se alista para el show que protagonizará en el Teatro Caupolicán el sábado 20 de agosto a las 19:00 horas, en un escenario con capacidad para unas 5 mil personas. Será una noche especial para la artista: un debut.
Trinidad lo siente como un recinto significativo, porque en distintas ocasiones lo ha visitado para escuchar a algunos de sus músicos favoritos, como Miranda (“que me gusta mucho”), Javiera Mena, Ases Falsos y Manuel García.
—¿Qué importancia tiene este concierto para ti?
—Es la instancia que no tuve en pandemia de poder presentar el disco entero, y ahora con la versión deluxe, con todas las canciones que componen el proceso, y también repasar todo junto a los fans, desde mis primeras canciones que ya no estoy tocando en vivo como “My only one”, porque hay veces que no me caben en los shows. Pero ahora espero hacer un concierto de hora y media o dos, tener invitados, encontrarme con los fans y ponerles cara. Es un sueño.
—En cuanto a escenarios, ¿cuál es el siguiente paso?
—Festivales, por ejemplo. No he tenido la oportunidad de ir al Festival de Talca, que es súper grande. Obviamente quiero ir al Festival de Viña y, bueno, a Movistar Arena, hacer todas esas cosas, la Quinta Vergara. También irme de gira por Chile. Me fui a México y España, pero no he ido a Chile para presentar el disco, por temas de aforo. Ahora se viene eso dentro del corto plazo.
—¿Has empezado a trabajar en algún nuevo álbum?
—En México y España me metí al estudio varias veces, casi todos los días, así que obviamente estoy haciendo hartas canciones, viendo cuándo se lanzan, pero siempre estoy componiendo, armando cosas nuevas. Este año estaré sacando más música.
“Lo tengo muy planeado”
A principios de junio se viralizó un video de la artista pop británica, Dua Lipa, carreteando junto al actor español Aron Piper. Sin embargo, no fue ese encuentro lo que más sorprendió en este rincón del mundo, sino que de fondo se escuchaba el hit “Ultra solo”, de los chilenos Polimá Westcoast & Pailita.
—¿Hay alguno de estos artistas con el que te gustaría colaborar?
—Soy muy fan de Polimá; eventualmente me encantaría hacer algo con él. Soy muy fan de Young Cister también. A Pailita también lo encuentro un artista muy completo y me interesa mucho: es muy tierno, su historia también es súper admirable, que sea de Punta Arenas… Bacán ver cómo gente de regiones está haciendo música... Bueno, y de las artistas mujeres también me encanta Cami (Gallardo), Paloma Mami y Fran Valenzuela.
—Haciendo un poco de ciencia ficción, ¿cómo imaginas tu vida en diez años?
—Uuh, también lo tengo muy planeado —contesta y ríe—, está en mi diario de vida. Eso es a mediano plazo. Quiero tener varios discos, por lo menos tres. Quiero haber ya cumplido mis metas de girar por todo el mundo, por todo Chile. Y no sé cuándo, pero empezaré a producir con más gente, a componer. Me imagino una vida entera metida en el mundo de la música, probablemente tocando, pero también trabajando con artistas nuevos, haciendo canciones para ellos.
—¿Y siempre totalmente dentro de la música? ¿O alguna otra incursión como en El discípulo del chef?
—Me pasa que la música es un espacio muy amplio. Hay programas de canto como The Voice (CHV). Me imagino perfectamente en la tele en algún futuro. Me encantó también la experiencia que tuve en El discípulo del chef. Finalmente para mí es una plataforma para llegar a más gente. Me imagino perfecto en la tele teniendo un programa quizá... Estoy inventando. Me gusta hacer muchas cosas.