La cantante cautivó a sus seguidores con su primer disco Cristal y se ha convertido en una de las voces femeninas más destacadas del pop nacional. Estrenó una nueva canción y en una conversación con La Cuarta recordó los inicios de sus carrera en pandemia, el proceso creativo detrás de su álbum debut y los proyectos que se vienen a futuro. “Shirel pa’ rato, sin duda”, asegura.
Nicole Shirel Davidovich sabía desde pequeña que su pasión era la música. La cantante chilena-peruana se ha transformado en una de las artistas “promesa” de la escena nacional, cautivando con su melódica voz y sus característico sonido.
Con tan solo 16 años, Shirel se aventuró y fue una de las participantes del programa de talentos The Voice, siendo una de las pupilas de Luis Fonsi e incluso llegando a ser semifinalista.
Este fue un primer acercamiento de la joven de 24 años a la música, pero su carrera comenzó a inicios de la pandemia en 2020, cuando lanzó su primer sencillo “Money”, con la producción de Cristián Heyne.
Tras esto, siguió conquistando al público con las canciones “Sola”, “Dímelo”, “Duele” y luego un remix de “Money” junto a Polimá Westcoast, colaboración que se gestó a partir de un mensaje en redes sociales.
Fue en noviembre de 2022 que la espera para sus seguidores terminó y Shirel publicó su esperado primer disco, “Cristal”, un álbum en donde la artista experimentó con el pop.
Tras sus exitosas presentaciones en el festival Primavera Sound y Lollapalooza 2023, la cantante presentó el Live Sessions de Cristal en Youtube, donde interpretó algunas destacadas canciones de su disco debut en un formato más íntimo.
Shirel conversó con La Cuarta e hizo un repaso sobre su carrera hasta el momento, detalló el proceso creativo detrás de su primer disco y sus proyectos a futuro.
—Hace poco lanzaste tu nueva “Otra Mujer”, ¿qué buscabas transmitir con esta canción?
Es una canción que es especial, le tengo mucho cariño. Nace desde un sentimiento muy oscuro, yo estaba atrapada en mis inseguridades, en querer ser como otra persona o alguien diferente. Y escribí un poema en mi celu, ya no lo puedo repetir exacto, pero el mensaje era que con este sentimiento podía escribir canciones tristes, pero no, me rehúso, voy a escribir algo alegre, voy a sacar a bailar esta pena y voy a celebrar que la vida es mía. Lo di vuelta un poco y de ahí nace esta canción que la hicimos como en una semana, una maratón de hacer música. Yo andaba con la musa, tuve que ir corriendo, que es algo que no hacemos mucho. Yo soy mucho de trabajar más lento, revisar y volver, darle una vuelta. Creo que el resultado refleja un poco ese cambio de método, salió todo muy fluido, muy intuitivo. Esa es la invitación de esta canción, a ser esa persona que quieres ser, a celebrar un poco la vida. Me conectó un montón con el poder de la música, poder transmutar esas emociones que a veces son oscuras y transformarla en algo hermoso (risas).
—¿Cómo fueron tus inicios en la música, de dónde nació este amor por la música?
Desde que tengo memoria que me encantaba la música en general, bailé, toqué instrumentos en el colegio, hice todas esas cosas. Mi mamá es muy lectora, me crucé con sus libros de poesía y ahí como que una Nicole adolescente se sorprendió muchísimo, porque me encontré con este idioma, que era como castellano pero no era como castellano. Y nada. Empecé a escribir mis propias cositas, mis canciones, poemas, y de ahí en adelante seguir esa ruta. De adolescente un poco más me metí a varios proyectos, pasé por la tele, me dí la vuelta larga. Y en el 2020, en abril del 2020, en el apocalipsis, empecé a sacar música. Saqué mi primer sencillo bajo el proyecto de Shirel.
Todo pasa por algo
—Esta etapa de tu carrera partió en la pandemia, ¿cómo fue para ti y cómo lo viviste?
Parto diciendo que yo pasé la pandemia en mi casa, calentita, sana. Y ahí hay mucho que agradecer. Pero, siempre me da risa cuando me acuerdo. Yo soy una persona muy organizada, hago mis listas, mi agenda, y tenía planificado el lanzamiento de esta música en la que venía trabajando por mucho tiempo, así, súper meticulosamente todo.Y de un minuto a otro, pandemia, se acaba la vida, nos encierran, nadie sabe si la hue.. va a durar tres semanas o tres años. Me acuerdo llorar, como ‘¿me están hueveando? ¿Esto tiene que ser broma? Primera vez que pasa’.
“Pero no sé, tuve como un instinto en la guata que me dijo ‘tirate igual a sacar estas canciones’. Y menos mal que lo hice. Literal mi primer sencillo “Money” salió el 3 de abril de 2020, recién llevábamos días encerrados. Siento que fue de esas cosas que el destino a veces hace lo suyo, porque igual, en esas condiciones de poder estas sanitas y tranquila en la pandemia, para mucha gente se abrió el espacio para descubrir nueva música quizás. Tener a los artistas más grandes del mundo encerrados en sus casas como que equiparó la cancha en algún aspecto. Y yo creo que para los artistas emergentes fue una pequeña oportunidad de entrar a personas que tenían más espacio para recibir cosas nuevas”, agrega la cantante.
“Igual fue muy loco, desde mi pienza. Salia la canción y como ‘son las doce, salió (silencio) ¡Bacán!’. Era rarisimo. Pero no, gracias a Dios por las redes sociales que estuvieron ahí apañando. Se sintió caleta la recepción de las personas y el cariño, porque de repente uno está en carrera que es ruda, no siempre ves cuando vas a ver la luz y ahí están las redes y la gente mandando su amor. Eso se agradece muchísimo”.
“Yo soy una artista muy escenario, ahí fue cuando me formé, lo eché mucho de menos también. Pero, cuando finalmente se acabó la pandemia, dar mis primeros shows y encontrarme con personas que se sabían mis temas fue algo muy fuerte. Yo escojo creer que todo pasa por algo y aquí estoy tres años después, a pesar de la pandemia, siguiendo mi carrera”.
—Con tan solo 16 años fuiste participante en The Voice. ¿Qué lecciones te dejó tu paso por el programa?
Yo estaba en segundo medio en el colegio cuando me metí a esa experiencia. No sé si fue como un aporte en cuanto a exposición o si despegó mi carrera, ni una de esas cosas, creo que fue algo más acotado. Pero lo que sí me llevo es que fue la primera vez que me enfrenté a la industria del entretenimiento. Y yo, por mí, mi nombre, haciendo lo que yo sé hacer. Asustada, era la más chica del programa, falté al colegio mil años (risas).
“Pero me di cuenta, primero, de la cantidad de trabajo que requiere. Uno sueña muchas veces con algo y de repente te das cuenta que va a ser mucho más difícil de lo que pudiste haber anticipado. Punto dos, como que salí muy determinada de que esto es lo que quería hacer, que la música era lo mío. También entré buscando un poco esa validación de ‘a lo mejor tendré o no talento’, que yo creo que los artistas nos preguntamos mucho. Esa experiencia fue reafirmante para mí, a los 16 años, te la pudiste en la tele, y lo disfrutaste. Salí súper determinada. Aprendí muchísimo, de mis compañeros, de los coaches. Creo que fue importante para darme esa fuerza de decir ‘ya, a lo mejor si puedo y lo voy a tratar de hacer’”, explica Shirel.
—Pasaron algunos años desde tu participación en el programa hasta que lanzaste tus primeros sencillos. ¿Qué pasó en ese tiempo?
Después me tocó volver al colegio, dar la PSU y todas esas cosas de adolescente. Yo ya tenía este sueño que era muy evidente. Salí, estuve en un montón de proyectos de música que no salieron, hice cosas de “songwriting”, estudié en la universidad, no la terminé, pero lo hice. Estuve en muchos proyectos. Me tocó viajar mucho por trabajo. Me la busqué un montón. Creo que también por eso llegué al 2020 a mi proyecto como solista de Shirel súper clara de quién era yo, habiendo aprendido un montón, tuve la oportunidad de trabajar con otros artistas. Me formé. No saqué música pero hice un montón de cosas alrededor de la música, busqué todas las oportunidades que pude. Llegué a encontrarme con mis propias canciones, desde un lugar un poco más claro, un poco más adulto quizás que la Nicole de 16 que lo soñó.
—¿Cómo fue ese proceso para poder encontrar tu propio sonido?
Ensayo y error yo creo, siento que es un proceso infinito para los artistas. En mi caso, tenía alguna claridad de lo que era, pero siento que mi propia identidad también se ha ido desarrollando en el tiempo. El año pasado en noviembre saqué un disco que se llama Cristal, mi primer disco, y ese proceso también fue una búsqueda muy intensa. Hallé un poco eso que estaba buscando, sonidos con los que me sentí identificada, cómoda y cosas que tuviera yo como la fuerza de salir a defender. Encontrar tu sonido es algo que uno necesita hacer, pero también es muy abstracto. Los artistas no tenemos una universidad de artistas, ni una guía de cómo se hace. Para mí fue un poco eso, seguir el instinto que creo que de eso se trata, de poder conectarse con eso dentro de tí, que te dice para dónde ir, y esa es tu identidad. Cuando uno lo sigue, las cosas son consistentes sin mucho tratar, porque es ser fiel a quien eres, y así ha sido ese viaje para mi, seguir mucho mi guata y confiar.
Cristal, un esperado debut
—¿Cómo fue el proceso creativo para escribir tu disco debut, Cristal?
Cristal es un proyecto al que le tengo muchísimo cariño. En mi sueño de ser artista estaba hacer discos, encerrarme en el estudio y profundizar en un proyecto, y cuando se me dio la oportunidad de poder hacerlo para mi misma, me lo regalé. Eso es Cristal, es un disco conceptual que habla de encontrarse uno mismo, un proceso que yo creo todas las personas vivimos, que yo viví escribiendo. Cada canción es un momento en ese proceso. Desde “Romper Platos”, que es la rabia y esas ganas de destruir todo cuando te estás encontrando, hasta finalmente “Piquete”, que es la aceptación de uno mismo, el empoderamiento, el saber que puedes hacer todas las cosas.
“Cada canción es uno de esos pequeños momentitos que quise retratar en música. Para mí siempre es muy hermoso cuando saco canciones porque de repente yo escribo hue… y digo “esto es muy personal”, “quién sabe lo que va a pasar con esto”. Y al final siempre encuentro gente que siente lo mismo que yo, que ha pasado por cosas parecidas, y eso es lo más mágico de la música, que nos acompaña, nos conecta de una manera que solo la música puede. Yo espero siempre ser una artista de discos, me encanta esa forma de trabajar y esa oportunidad que te dan los álbumes de profundizar, de desarrollar diferentes aristas de uno como artistas. Es un álbum que, desde las letras, que es algo que me encanta y me caracteriza, hasta las guitarras”, detalla.
—Eso es algo súper interesante porque hoy en día hacer discos no es tan común como antes.
Es cierto, estamos en ese mercado que te exige rapidez estar sacando música a cada rato. Creo que los singles son bacanes también, te dan una libertad y una liviandad que quizás el disco no te da, esta posibilidad de explorar y jugar. Pero tiene que ver con algo que me gusta a mi, escucho mucho disco, creo que es un ritual hermoso, que todo esté ordenado, ese rollo me fascina y me permite a mi como consumidora de música entrar en la mente de mi artista favorito. Me encanta la idea de entregarle eso de mi a otra persona, esa posibilidad de entrar. Todo ese ritual de ponerle play a algo, que dure 40 minutos, te lleve en ese viaje y me encanta hacerlo también. Esta industria y este trabajo que escogimos los artistas es super rudo y tiene un montón de rechazo, de dolor, de dificultades y si no cuida mucho lo que te moviliza a hacerlo, es muy difícil perderse en las cosas difíciles que tiene. Entonces yo soy muy protectora de por qué lo hago, tiene que ver con eso, con hacer la música que me encanta, me conmueve y ojala hacerla hasta viejita.
—En los Premios Pulsar te presentaste en un segmento junto a Soulfia, Loyalty, Akriila y Kya, ¿cómo fue compartir escenario con tus compañeras y cómo ves está escena femenina?
¡Mágico! Me da mucho orgullo ser parte, todas mis colegas son unas brígidas, cada una de ellas, y se hizo muy evidente en este show lo diferentes que somos, pero de verdad son todas extraordinarias. Siento que estamos en una industria que nos pone en una desventaja en algún grado solo por nuestra calidad de mujeres y me encanto esta oportunidad de la CSD de sentar a toda la gente de la música y obligados a ver esta hue… De verdad que las chicas son todas extraordinarias, para mi es demasiado inspirador verlas trabajar aprendo mucho junto a ellas. Además, con Kya y Soulfia, por ejemplo, nos hemos ido encontrando en muchos de los peldaños de esta carrera, es muy mágico. Nos hemos ido haciendo amiga. Compartimos muchísimos desde nuestro amor por la música, hasta nuestra experiencia en la música, hasta las cosas difíciles de la música y de ser mujer y todo lo que eso significa.
“Es muy mágico ese show que nos juntó a todas y esta carrera nos ha ido juntando también. Me da mucho orgullo pertenecer a una generación que la tiene tan clara que está tan dispuesta a hacer lo que haya que hacer, como en este show, donde la actitud de todas eran mágicas. Todas muy dispuestas a que la hue.. salga bien, por hacerlo juntas y que quede bacán porque el éxito de la otra es éxito para una. Ya era hora de que les demos el espacio a todas las cabras que se lo merecen, trabajaban demasiado y tienen muchísimo que entregar”
—¿Qué proyectos tienes para el futuro?
Se viene un año increíble, estoy muy emocionada por este segundo semestre. Se vienen unas colaboraciones que me tienen muy emocionada. Se viene harta música nueva. Estoy trabajando en un proyecto hasta fin de año, nada, un montón de cosas. Shirel pa’ rato, sin duda. Mucha música nueva.
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