En un mundo donde los accesorios suelen ser solo una forma de complementar un look, Rockinmonster ha logrado transformar la joyería en una experiencia única.
Rockinmonster es la marca perfecta para quienes buscan destacar con sus accesorios, siendo además un viaje a través del tiempo, el arte y las emociones.
Con cada diseño, Connie logra capturar la esencia de épocas pasadas, fusionándolas con un toque moderno y personal.
La historia de Rockinmonster comenzó cuando Connie era apenas una niña. Desde pequeña, fue testigo del talento de su mamá, quien trabajaba con porcelana fría.
“Crecí viéndola hacer cosas, ella trabajaba en porcelana a un nivel brutal. Mi mamá era impresionante como artista”, señala Connie.
“De metiche me metí a la porcelana porque ella la ocupaba, me enseñó a esculpir rosas y me obsesioné con hacerlas y es lo que más hago ahora”, cuenta la joven quien a los 15 años, comenzó a crear sus propios accesorios, pues no encontraba piezas que le gustaran, y así comenzó a dar forma a lo que hoy es una marca que enamora a muchos.
Aunque estudió nutrición, el destino la llevó por otro camino. “Al principio era muy part time casi como un hobby porque estaba estudiando”, sin embargo actualmente Connie señala que “el amor de mi vida es mi marca, es el arte, el diseño”, algo que se puede notar en cada una de las piezas de Rockinmonster.
El concepto de Rockinmonster: Nostalgia y amor en cada detalle
Para sus distintas colecciones, Connie se inspira en las décadas de los 40, 50 y 60, elementos del pasado y en la conexión profunda con su madre.
Las rosas, que se han convertido en su emblema, son una forma de honrar a su madre y también un material que ella sigue utilizando por sus recuerdos. “Rockinmonster es amor, para mí, mi marca es un vehículo de entrega de amor” dice Connie.
A lo largo de los años, la marca ha ganado seguidores que no solo compran joyas, sino que se convierten en parte de una comunidad.
Según señala la joven emprendedora, las clientas que más disfrutan de las creaciones de Rockinmonster, son personas con personalidad, que disfrutan de lo retro y el rockabilly.
“Siento que es gente amorosa que siente la energía de mi marca y se siente atraída y vibra parecido, por hippie que suene. Siempre que hablamos nos decimos cosas lindas aunque seamos completas extrañas”, señala entre risas.
¿Qué hace única a Rockinmonster?
La calidad, el diseño y la autenticidad son los pilares de cada pieza. Todo el proceso creativo comienza con un dibujo, que luego se transforma en porcelana fría, un material que Connie defiende por su sustentabilidad y por su capacidad de mantener esa “magia de antaño”.
La inspiración para cada creación viene de la mano de la nostalgia, “me inspiro mucho en cosas antiguas, por ejemplo en cómo se veía una señalética de los moteles de los años cincuenta en las carreteras de Estados Unidos, un juguete antiguo, paletas de colores antiguas, peinados de Hollywood antiguos. Toda mi inspiración al final tiene algún filtro como de nostalgia”
Connie señala que pone todo su corazón en cada pieza y colección de Rockinmonster, a pesar del gran trabajo que esto conlleva, pero al ser algo que la apasiona, también es algo que le entrega mucha felicidad.
Realizar una colección completa puede tomar hasta un mes de trabajo duro, sin embargo la joven señala que “disfruto tanto mi trabajo que igual estoy muchas veces escuchando música, cantando y yo misma me emociono caleta cuando hago cosas que están quedando bonitas”
Cómo comprar en Rockinmonster
Si buscas algo más que simples accesorios, si te atraen los diseños con personalidad, historia y amor, Rockinmonster es para ti.
Cada pieza no solo embellece tu look, sino que te conecta con esa nostalgia y esa energía especial que Connie pone en todo lo que crea.
Para poder comprar en Rockinmonster deberás hablar con Connie a través del perfil de Instagram de la marca (clic acá) donde ella te enviará el catálogo con las piezas disponibles.
Cabe señalar que Rockinmonster realiza envíos en Santiago y a regiones, pero si quieres vitrinear en persona, Connie será parte del Creativafest en Ñuñoa, entre el 21 y 22 de diciembre.