Al borde de la muerte. Así de pelúa la vio la actriz Solange Lackington, tras practicarse una cirugía estética (busto y lipo) que la dejó hermosa por fuera, pero con serias secuelas en su cuerpo, al punto que pensó en lo peor.
“Estuve con una infección que me tuvo 5 meses con una herida abierta en mi cuerpo. En un minuto pensé que me iba a morir. Sentí que me estaba entregando a eso, veía que no había mucho más que hacer”, recordó Solange en radio Cooperativa, sobre la horrible experiencia de hace casi dos años.
“Gracias a Dios, mis hijos y mis papás fueron mi impulso para decir que había mucho que hacer más todavía... Me dijeron que yo tenía que seguir viviendo, porque yo era muy importante para ellos”, relató la buenamoza, que tiene un papel en la telecebolla “Ámbar”, próxima a estrenarse a las 20.00 horas en Mega.
Solange evidenció que el drama aún la tiene malena mentalmente, y eso que su cuerpo ya se curó. “La herida cerró físicamente, pero es una cicatriz que no ha cerrado totalmente”, lamentó.
