Las horas más peludas de su vida está pasando el ex recluta de "Pelotón", Óscar Garcés, quien fue detenido la madrugada de ayer por Carabineros en Calama, tras la denuncia de acoso sexual que interpuso una mujer de 25 años.
El cabro, que actualmente pololea con la brasuca Francini Amaral, viajó junto a Cristián Vidal y Francisco Schilling, con quienes poco antes del hecho realizó un evento en la disco "Sala Murano" de por allato.
Ayer en la audiencia del Tribunal de Garantía de Calama, el fiscal Pablo Medina relató la denuncia en la cual se indicó que el ex "Protagonistas de la Fama" llegó a eso de las 5 de la madrugada al hotel Sonesta y llamó a la recepción para solicitar un servicio a la habitación.
Momentos después se produjo un fuerte altercado con una trabajadora del lugar. En la denuncia, la afectada acusó a Garcés de intentar besarla a la fuerza y hasta de darle agarrones con el fin de abusar de ella, razón por la que el fiscal Medina explicó: "El imputado fue formalizado por abuso sexual en contra de una mujer".
Tras el incidente, la fémina llamó a Carabineros y luego constató lesiones en el Servicio de Urgencia del Hospital Carlos Cisternas. Fue entonces que los funcionarios policiales informaron al fiscal, quien ordenó la detención del hermano del arquero de la Universidad Católica, Paulo Garcés.
Terminada la audiencia, el fiscal detalló que en el caso del ex chico reality la investigación tendrá un plazo de 80 días, por lo que el cabro recuperó su libertad con medidas cautelares.
"El acusado no puede acercarse a la víctima en un radio de 200 metros", soltó Medina, quien explicó que en estos casos la pena puede ser "de tres años en su grado mínimo, hasta siete años en su grado mayor".
AFECTADO
Luego de recuperar su libertad, Óscar viajó de vuelta a Santiago y se notó muy afectado con la situación. "Estoy complicado. No quiero entregar una versión hasta hablar bien con mi abogado", relató a La Cuarta. Recordemos que el hombre fue demandado en diciembre del 2009 por su ex, Jocelyn Matus, quien lo acusó de no ponerse con la pensión de alimentos de su propio hijo.