La cantante británica Adele está furia con el semanario franchute Public, que mostró una serie de fotelis en las que aseguraban que salía la sanita chiquilla junto a un ex probando los amortiguadores de un toco.
Al saber de la nota, Adele no tardó en hacerle un ring a sus abogados para que le echaran la foca a los difamadores en tribunales. "Nuestra clienta no aparece en las fotografías", aseguraron los defensores que ya iniciaron el round legal.