Un nuevo enfrentamiento protagonizaron las curvilíneas Nicole Moreno y Adriana Barrientos al interior de la discoteca Entre Diablos. Entre gritos y harta mala onda, las pinturitas aprovecharon para sacarse los trapitos al sol. ¡Y de qué manera!
Todo sucedió el viernes, cuando ambas chiquillas se encontraron cara a cara en el evento que conmemoraba el aniversario de la discoteca ubicada en el sector de San Pablo. Y como hace rato que se tienen sangre en el ojo, pasó poco tiempo para que ardiera Troya, donde hasta Daniel Pinto salió al baile, y eso que ni siquiera estaba presente.
Y es que Luli, quien llegó con maquillador incluido para presentar su show, evitó a toda costa que la Leona estuviera en la discoteca en calidad de invitada. "Nicole le pidió al dueño de Entre Diablos que me bajaran del evento, pero como no la pescaron, pidió el doble de plata. Lo chistoso es que no la tomaron en cuenta", comentó Barrientos a La Cuarta.
Hasta ese momento todo estaba en calma, pero lo que inició el holocausto farandulero fue una pequeña cháchara entre Adri y Gonzalo Irarrázaval, el peor es na' de la rulienta, quien al enterarse de lo que estaba sucediendo increpó a la Barrientos.
"Me invitaron al sector de camarines para conversar con la prensa, cuando llegó Nicole completamente ofuscada y con intenciones claras de pelear", aseguró la Leona.
Lo que sucedió a continuación es de antología, y es que Luli, olvidándose que estaba su pololo en el lugar, aprovechó para enrostrarle su supuesta aventurilla con Pinto.
Según Barrientos, Luli utilizó toda la diplomacia que le caracteriza y le tiró una bomba: "¿Tienes claro que me acosté con tu pololo? Tira rico, pero lo tiene chico", habría dicho la crespa.
Pero eso no es todo, ya que la ex 1910 agregó al diario pop que "quiso agredirme verbalmente, pero como es carismática le salió gracioso. No me enojé, fue tenso pero cómico. Le costó meses y dos viajes a Argentina para que reconociera su infidelidad. Creo que se tomó unas copitas de más. Parecía un sketch de Morandé con Compañía", remató.
De inmediato agarramos el celulítico y llamamos a Luli, quien sólo se limitó a decir que "no me interesa contar detalles ni nada que tenga que ver con Adriana".
