Un gran paso en la historia de la humanidad acaba de dar Adriana Barrientos. De las pasarelas de discos, los tongos y sus mil amores chúcaros, la rucia ex morena hace una semana está de actriz, aunque con el detalle de que se interpreta a sí misma en calidad de celebridad máxima.
Adri fue llamada por Canal 13 para subirle la temperatura a la telecebolla nocturna Peleles. Como ella no es rogada aceptó la mano y hace una semana que se encuentra grabando su complejo papel de Adriana Barrientos.
La intervención ya fue realizada y se verá en un par de semanas. Todo ocurre en el café con piernas que los macabeos arrendaron para ocupar las lucas que sacaron de los camiones asaltados.
En dicho local deciden armar una cotota fiesta con harta chiquilla y globitos. Pero el merecumbé debía tener una invitada rimbombante y estelar, ahí fue que pensaron en la Barrientos como persona y personaje.
El carrete prende como parrilla de fonda con la invitada, quien concué usó medio metro de género para taparse el envase.
El resto de las musas, le hizo el peso con trajes de conejitas cachudas.
La experiencia tiene a la "Leona" tocando estrellitas y cruzando las carteras Louis Vuitton para que se le sigan abriendo puertas en la actuación.
"Ay, sí, llevo varios días grabando y todos han sido muy buena onda, es una decisión muy acertada la que tomé. Ojalá me sigan llamando para actuar más, porque me encantó", desembuchó.
El tiempo que ha compartido con el elenco masculino, compuesto por Cristián Campos, Claudio Arredondo, Mario Horton y Daniel Alcaíno, entre otros, también la ha dejado pochita y con el ojo bastante engordado. "Tengo que decir que son todos estupendos, muy buenosmozos", sacó cuentas.
