Ale se refrescó al natural en primavera

Con 600 centímetros cúbicos en cada callaguagua, es prácticamente imposible mirar a los ojos a la tremenda Alejandra Díaz, y ella lo tiene más que claro: "No te preocupes, si los hombres siempre se quedan pegados en mis pechugas", dice picarona la musa revisteril de Ernesto Belloni, el popular Che Copete.

"Sé que soy una mujer exuberante, pero siento que la delantera se ve acorde a mi cuerpo porque por mi altura todo está bien proporcionado", agrega la modelo de signo Virgo y medidas (afírmense) 94/61/94... ¡como pa' quedar pochito!

"Como tengo harta cadera y poto, se me ve todo ordenadito", remata la chiquilla, chocha con su mansa ni que percha.

Aunque, claro está, tanta carrocería amerita varios cuidados por parte de la ricura con yapa. "Evito hacer ejercicios con saltos, no troto, no hago aerobox ni nada que implique rebote", confiesa sin pudor, porque al parecer las réplicas de cada uno de sus pasos se sienten hasta Japón.

Y no para ahí, porque tanta contundencia sirve pa' matar en la calle, pero no para hacer tuto, porque sus mega atributos le exigen atención incluso para roncar a pata suelta. "Trato de no andar sin sostén y para dormir me pongo un peto ajustado, porque la clave de esto es mantener ordenaditas a las niñas", expuso con lujo de detalles. ¡Pooooobrecita!

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