El culebrón amoroso de Kike Acuña y Roxana Muñoz al parecer no tiene para cuando acabar. Es que tras conocerse la detención del ex futbolista por violencia intrafamiliar, los tortolitos apagaron el incendio con bencina y se pasearon por todas las pomadas faranduleras.
Primero fue el dolape quien hizo sus descargos en Secreto a Voces, y anoche fue el turno de la maniquí, quien en Primer Plano soltó toda la papa de lo que ocurrió la madrugada de este martes en su palacete de la comuna de Recoleta.
Y es que la cabra prendió el ventilador en mala contra su ex pareja y hasta llegó al estudio con unas grabaciones del momento exacto de la pelea, donde se ve al Kike vuelto mono y amenazándola con tirar un plasma por el balcón si no le devolvía una botella de vino, según aclaró la misma Roxana.
Además, se cacha al vuelo cuando el compadre se acerca furia a la chiquilla y a su hija, aunque justo en ese minuto la cámara se va a negro y sólo se escuchan gritos en el interior del depa.
"Cuando toma el televisor ya iba en la tercera botella, me estaba insultando, le decía cosas a mi hija, le fui a esconder la botella y me decía ¡pásamela! Ahí dijo que tiraría el plasma por la ventana. Después fue a quitarme la cámara y arranqué porque me dio miedo, estaba como loco", contó Muñoz.
Además, en la grabación también se ve como el ex volante intenta romper una puerta para llegar a la habitación donde Roxana estaba escondida junto a la pequeña Taira, quien vio en HD todo el round de sus papis.
Eso sí, Acuña contó al rato en un enlace que esas imágenes eran terrible añejas y que su ex esposa, a quien le achacó en reiteradas ocasiones tener problemas con el alcohol, anda puro vendiendo humo. "El agredido soy yo", remató.