El día de ayer no fue una jornada cualquiera para Benja Vicuña. El taquillero actor se integró al selecto grupete de personalidades nacionales que ostentan el título de Embajador de Buena Voluntad de la Unicef.
La distinción caló hondo en el cucharón del chiquillo que no aguantó la emoción y soltó su buen par de lagrimones en la ceremonia que se realizó en la sede de este organismo en la capital.
En la movida, que contó con la participación de Iván Zamorano (Embajador hace 10 años) y Egidio Crotti, representante de Unicef para Chile, Benja explicó el motivo de tanta emoción. "Es que ahí no estaba el personaje, no estaba el actor y me enfrenté al niño que fui, al niño que soy", indicó aún emocionado.
Vicuña indicó que su participación en la Unicef no es pa' la tele y que se mojará la camiseta como corresponde: "Yo me tomo esta labor muy en serio. Para mí es un compromiso real".
En la ocasión el actor estuvo acompañado por toda su familia y, obviamente, por "Pampita", quien también se mostró muy emocionada con el reconocimiento a su pierna peluda.
La idea del Benja es cumplir con una gran meta: "Cuando hicimos la campaña de las camas para los niños en Peñalolén, la meta era de 70 mil y no lo logramos. Espero que de aquí a dos años se pueda lograr lo que nos propusimos y esto sin duda me da un nuevo impulso".
Frida Sepúlveda C.