Por más que Britney evite los escándalos, siempre está la prensa mala leche que la tira pa'bajo. Ahora, labotana.com aseguró que la princesa del pop, la única que ha logrado caerse al fondo de las drogas y alcohol, engordar como wagyu y raparse el mate, para luego reaparecer como sirena, le teme al público, al punto que no se atreve a cantar en vivo en un espectáculo.
"Ella está muy presionada, porque hace mucho no hace ningún show en vivo. Ella sabe que con un error que cometa la prensa se le irá encima", verseó el medio desconociendo el esfuerzo que ha hecho por sacarse la celulitis y dejar el copete.