Carola Soto quiso hacer algo potente a través de su música y armó un tema, el "Todo vuelve a cero", donde le dice a las mujeres que no se dejen agredir, dejen el miedo atrás y rehagan sus vidas lejos de quienes les hagan daño.
La letra es un parelé a la violencia contra las féminas, pero Carola no se quedó solo en las palabras. Grabó el videoclip con Signia Valdivia y Carola Barría, quienes soportaron brutales ataques de sus parejas.
Signia es de Rancagua y "fue maltratada por más de 30 años y el agresor todavía está libre", explica la ex "Rojo".
Barría, oriunda de Punta Arenas, tiene una historia más estremecedora aún. El padre de uno de sus hijos le arrebató los ojos en septiembre de 2013.
Tres años después, un hecho igual de imperdonable se repitió en Coyhaique, contra Nabila Rifo.
RENACIDAS
Soto las convocó a ser parte de su registro audiovisual para "Todo vuelve a cero" y ellas aceptaron altiro. Viajaron a Santiago y estuvieron tres días grabando. Ahí aparecen cantando junto a Carola Soto.
De esa experiencia, la artista cuenta que le impresionó la fuerza de sus invitadas y sobre todo la puntarenense: "Carola Barría está rehabilitada, de vuelta en la sociedad y trabaja en un colegio con niños especiales, es una mujer impresionante".
- ¿Cómo llegaste a ella?
- A través de un amigo mío que vive en Puerto Natales. Él conocía a una persona que trabajaba en el Instituto No Vidente, nos comunicamos con ellos, y nos dijeron que habláramos con Carola. La llamé, se lo propuse, y pensé que me iba a mandar a la miércale...
- ¿Y...?
- Me dijo que ella aceptaba, porque obviamente quería que no le pasara a otras mujeres... El tema es muy fuerte, lo que ella vivió es muy heavy.
- ¿Cómo fue el primer encuentro?
- Pensé que me iba a encontrar con una persona triste, pero es nada que ver, es impresionante cómo se toma la vida. Fue muy linda conmigo, vino con su mamá. Hubo una gran disposición y en mi página web hay un documental donde ella da testimonio de por qué aceptó grabar este video. Yo hablé bastante con las dos y hay mucha dependencia económica, de un techo... lo que hace que el hombre manipule, porque sabe que no tienen donde ir, ni como trabajar.