Se dieron muchas fechas para la boda de Cathy Barriga y Joaquín Lavín Jr., muchas de ellas farsas, farsas, farsas, pero la prensa farandulera olfateó su presa y nunca le sacó la marca. Por eso ayer llegaron a las afueras del depto de los tortolitos un lote de medios de prensa para captar alguna imagen o foto de la rubia en el día de su casorio por el civil.
La ceremonia estaba programada a las 20 horas, pero el ex candidato presidencial y padre del novio, Joaquín Lavín llegó a eso de las 18.30 horas con su esposa María Estela León para colaborar con el cotelé de su hijo. La mayoría de los invitados llegó piolita por una entrada posterior del edificio en calle Dardignac 162.
A las ocho en punto apareció la jueza de Recoleta Iris Maureira, quien fue la encargada de comprometer a los tortolitos en una ceremonia que se realizó en la terraza del edificio y que fue adornada con un gran arco de flores en forma de corazón.
Cerca de las 21 horas la jueza se retiró del lugar dejando establecido que la parejita al fin había puesto la millonaria en la libreta y que no cabía en sí de pura felicidad.