De los programas de talento de la pantalla enana el único que iba quedando en pie era Yo Soy de Mega, el que anoche tuvo su gran finalísima.
Los talentos que lucharon por los cinco palos del premio mayor fueron Marco Antonio Solís (Juan Francisco Riquelme), Américo (Héctor Hernández), Juan Gabriel (Aldo Bustos), Beto Cuevas (Víctor Cuevas) y Cecilia (Camila Arismendi).
Del lote, los dos primeros en irse cortina por decisión del jurado fueron Héctor Hernández y Víctor Cuevas.
El primero, que se mandó una performance a lo Américo, dejó el escenario con un caracho de dos metros y ante las pifias del público que no aceptó la decisión del jurado integrado por Paty Maldonado, Cata Pulido y Álvaro Salas.
"No tengo frustración, pena sí, pero el hecho de haber llegado a esta instancia me hace ganador. Ahora parte mi carrera y esto me sirvió como una vitrina", señaló el doblete de Américo.
Por su litro, el clon del Beto se limitó a señalar que "siento mucha pena y tristeza porque no pude seguir, pero me gustaría que Cecilia ganara el premio".
La pelea por saber quien sería el más seco estuvo terrible de peluda y se decidió por votación popular a través de mensajes de texto.
Los dobles de Cecilia, Marco Antonio Solís y Juan Gabriel fueron los encargados de ponerle emoción a la definición cuya balanza se cargó hacia la doble de la Incomparable, que por ganar se embolsó 5 millones y un contrato por toda la temporada para canturrear en el casino Monticello.
"Gracias por todo, más que los 5 millones estoy muy contenta de haber llegado acá. Voy a extrañar mucho, a los coristas, maquilladores, profesores, eso es lo que más me duele", dijo llorando a mares la ganadora.
