Wilma González lo ve como una mezcla de cocidos
La primera petazeta que llegó a nuestro terruño para estar en un reality show, fue la ex chica playboy Wilma González, cosita de Dios que dejó la vara alta con todos sus destapes y cahuines dentro de “Mundos Opuestos”. Como olvidar las escenas que se filtraron en que supuestamente con pura espumita se daba un calugazo con Mariana Marino.
La blonda y españolísima cree que “esto se está confundiendo un poco, como que se está mezclando lo que es el reality con los dating shows”.
Wilma que estuvo en su momento en “Pareja Perfecta”, el antecesor de “¿Volverías con tu ex?”, hizo este parangón a partir de su primer cocido de telerrealidad. “Esto lo comparo con ‘Mundos Opuestos’, porque yo estuve en el antiguo reality de Mega y los formatos son similares al actual, entonces, lo que pasa es que ya no sé si es verdad o mentira lo que está pasando, como que está todo muy maqueteado. Hay escenas que parece que salieran de un cuento de hadas”, remató.
Arturo Longton: el decano del formato
Si hay un compadre que ha demostrado ser conflictivo dentro de los encierros y más flojo que la mandíbula de arriba, ese es Arturo Longton, un eterno ex chico reality. Ahora con una buena temporada lejos de las cámaras de los estudios de tele, el tostado se puso filósofo y les midió el aceite a los concursantes y a los caporales de “¿Volverías con tu ex?”, “Siento que les falta ser más viscerales y no actuar tanto”.
Para Arturito los compadres que están encerrados tienen fecha de caducidad. “Ellos van a ser estrellas fugaces, porque no se sabe quiénes son realmente. La diferencia con un Ballero, un Joche o yo, por ejemplo, es que saben que somos locos o viscerales de verdad y eso llama la atención, lo que hace que después te inviten incluso a los programas de televisión, lo que no creo que les pase a ellos”.
Pero los aplaude de pie: “En realidad aunque sean pasajeros, los chicos lo están haciendo bien. Ellos aunque estén actuando están logrando forrarse de plata y de pasada hacen que el canal tenga muy buenos números, y si les funciona esa fórmula, que sigan”.
Con respecto a los que cranean, sólo tuvo flores para ellos. “Eso es lo que está consumiendo la gente, aunque sean inocentes en creer que la cosa es como la ven, siento que es una teleserie con un buen guión. Que sigan también”.
Junior Playboy siente la falta del macho criollo
Uno de los personajes más inolvidables de los realities es, sin lugar a dudas, Junior Playboy, el que con constantes salidas de libreto puso su nombre en la historia de la tevé chilena con sus payasadas. Y eso es lo que falta ahora sostiene el bautizado como José Luis Concha.
Para Junior, los representantes masculinos no tienen nada que ver con la realidad criolla. “Siento que lo principal que le falta es originalidad, cómo es posible que con suerte uno vea a un chileno adentro. Uno prende la tele y hay un tipo hablando italiano, otro argentino y otro español, como que uno no sabe dónde está parado. Faltan chilenos, y no lo digo por mí, porque me han llamado, pero debería haber un mapuche ahí con la pluma parada defendiendo nuestras cosas”.
Lo que le hace ruido también al siempre pretendiente de Eugenia Lemos, son las cuerpadas de los machos encerrados. “Lo que me deja loco, es que no hay nadie que sea normal, son todo muñequitos Ken, no voy a negar que son encachados los tontos, pero por último que le faltara un diente a uno. Y también se ve que está todo muy re maqueteado, parece teleserie la cosa, yo no suelo verlo, mi mami si, y no se comen ni una cazuela los compadres”.
Yamna Lobos la tildó de “la nueva nocturna”
Aunque Yamna Lobos no se hizo famosa por estar encerrada, la chiquilla se nutrió de este tipo de experiencias cuando marcó tarjeta en “Mundos Opuestos”, cocido en que conoció a Thiago Correa, con el que tuvo una laaaarga relación. Para ella, tanto drama y todo el llanto de “¿Volverías con tu ex?” le hace pensar. “Siento que es como la nueva nocturna de Mega”.
Y no es que la tire al voleo, pues en este reality para la ex chica “Rojo”, “todo gira en torno a una especie de guión. Parece como una teleserie venezolana en donde sus personajes están muy marcados como la villana, la inocente, el príncipe azul y todo eso”.
Lo que le molesta también a Yamnita es lo poco que se parecen las participantes a la típica mujer chilena. “Les falta un poco mostrar a algunas parejas que se acerquen a la realidad del televidente, son todos muy perfectitos y del tipo modelo”.
La Montero se cuestiona si entraría ahora
Mariela Montero es una chiquilla bife que aunque su primer acercamiento con Chilito fue mediante los shows de telerrealidad como “Pelotón”, ahora se desmarca de este formato que le abrió las puertas. “Ahora lo veo como espectadora más que como chica reality”, y no por sobrada, sino porque persiguió sus sueños como cantante y actriz.
Entre las cosas que tienen atacada a la ahora espectadora, están las constantes mochas que ocurren en el encierro. “Desde esa mirada es que me pongo a pensar si es que hubiera entrado a exponerme de esa forma, porque dentro la violencia es algo desmedido. El ver como se ensaña un grupo contra solo una persona es algo horrible, y tener que estar todo el día dándote de topes es desagradables, atroz”.
Para la che hay que hacer más el amor y no tanto la guerra. “Siento que la modalidad actual se basa en las peleas, y no siento que esté bien, hay que mostrar algo más. Ser un poco más humano”.
“Joche” es de los que quiere más competencias
José Luis “Joche” Bibbo es uno de los chicocos insignes de los realities. Sin duda fue uno de los que caló más hondo en su tiempo en la “invasión cordobesa” a nuestro terruño, y quien destacó en “Mundos Opuestos”.
Para el hombrón que habla caantaadito, en lo que está falto el último show de telerrealidad de Mega es en las extenuantes competencias a las que él fue sometido mientras estaba en la casona de Pirque. “Siento que lo raro, si se puede decir, es que actualmente “Volverías con tu ex”, en comparación con otros realities, los productores dejaron de lado lo mejor de las competencias. Las hacen, claro, pero no son como antes y el formato se basa directamente en las peleas que puedan tener los participantes”.
Además tuvo un reparo con las petazetas que se encuentran encerradas. Cada reality tiene su foco, su forma de ser, y en este las españolas son peleadoras. Entonces le dan a la producción para montar algo sobre eso, lo que se nota.