Más calientes que carbón de pollada andan los cholitos de Lima, Perú, producto de la repentina visita de la modelo inglesa Kate Moss a su país. La ricura internacional dejó la grande el martes, luego que un paparazzi perucho la fotografió mientras se paseaba en topless por la exclusiva piscina del Hotel Miraflores Park Plaza, de la capital de por allato.
De 36 primaveras, Moss llegó a Perú a las 18.30 horas del lunes pasado, procedente de España, y se refugió al toque en el cinco estrellas para que nadie sapeara su presencia. Es que la minurri sería la gran sorpresa de "Portraits", el evento con que el fotógrafo local y amigo de la belleza, Mario Testino, reinauguraría anoche el "Museo de Arte de Lima".
Kate ya había sido fotografiada mostrando sus gracias en pirulas playas de Europa, pero nunca se había rajado con una exhibición por estos lares.
