Coco Legrand pasará de la Quinta al quirófano

Cuando Coco Legrand llegó a la esquina de Américo Vespucio con Espoz para nuestra entrevista, montado en su imponente moto negra, la gente que pasaba por el lugar no lo dejaba avanzar para abrazarlo, felicitarlo y tomarse fotos con el astro del humor nacional.

Y era que no. Con más de 40 años de risas en el cuerpo, Alejandro González es uno de los humoristas más respetados y queridos por la barra pop.

Pero las cuatro décadas encima le están pasando la cuenta. A menos de una semana de presentarse en el Festival, sólo piensa en pisar por cuarta vez la Quinta Vergara, pero sabe que apenas salga del escenario deberá entrar a pabellón.

"Tienen que operarme de la cadera izquierda. Tengo artrosis y si no fuera por los remedios no podría caminar", dijo acongojado.

Coco se está tratando en la Clínica Las Condes y para poder seguir funcionando tuvo que recibir una infiltración (inyección entre articulaciones) de un derivado de morfina.

"Los años no pasan en vano", reflexionó.

La operación no será sencilla. A Coco tendrán que ponerle una prótesis en la cadera, por lo que tendrá que hacer una larga y lenta rehabilitación que lo ayude a caminar nuevamente.

Eso sí, pese a la dificultad del procedimiento, podrá seguir recorriendo Chile en su moto y realizar sus famosas rutinas. La idea del humorista es recuperarse lo antes posible para poder volver a los escenarios en abril con un show sobre política.

SÓLO CHICAS

La pasión de Coco son las motos. En la entrevista mostró tres de sus más preciados modelitos.

"La Pamela Díaz que es rica, fiera y negra. La gordi, que usa trajecito de dos piezas y me salió atea. La otra es la Fernanda Hansen, a la cual no saco a la calle porque no tiene patente", dijo dicharachero.

Todas sus motos llevan nombres de famosas y la mayoría han sacado premio. "Ahora voy con la Fernanda a Buenos Aires con la idea de ganar nuevamente", añadió.

Cada motito vale alrededor de treinta mil dólares, lo que son más de 16 millones de pesos chilenos. "Vendo una y me pago la prótesis", dijo bromeando sobre su futura intervención.

SHOW DIGNO DE ORÉGANO

La rutina del Coco comenzará con sus achaques de viejo, problemas con sus hijos y con su yerno. Después, se explayará con tres grandes sentimientos.

"Tengo una trilogía espantosa que me destruye por dentro, al igual que la Alianza y la Concertación. Por un lado está Alejandro González, que no hay cómo subirlo a los escenarios. Por otro está Coco Legrand, que no hay cómo bajarlo. Luego Álex, arrancado de una película de los años 70".

El tal Álex está inspirado en "La naranja mecánica", pero el Coco aún no decide si se pintará el ojo como el personaje del film.

COMPARTIR NOTA