Dicen que hay cosas que se llevan en la sangre y así se notó el sábado, cuando el nieto de don Francisco, el colorín Ilan Numhauser, hizo que Canal 13 le ganara a toda su competencia con el estreno de “Usted no reconoce Chile”, pomada de viajes que realizó junto a su tata y que se llevó todos los aplausos del respetable, pero... ¿de donde salió este cabro? ¿hijo de quién es?
El diario pop le hizo un escaner al hombrón, regalón de Vivi Kreutzberger, quien nos soltó la papa.
Ilan, con acento en la I y de 28 pepas, es un cineasta que egresó de la generación del 2012 de la Universidad del Desarrollo. “Entré a estudiar primero publicidad, que era lo único que se acercaba a lo que quería, pero justo se abrió la carrera de cine en la universidad, así que a los nueve meses opté por cambiarme, terminé el año en noviembre y ya estaba en marzo estudiando cine”.
El barbudo, que le parla al inglés de corrido nació en Gringolandia. “Yo soy gringo, nací cuando el programa llevaba un par de meses al aire desde Miami, así que no pude ver lo que se hacía aquí”, contó.
- ¿Cómo te nació el bichito del cine?, ¿alguna influencia de tu tata?
- En realidad la principal influencia cinéfila viene de mi padre, que al igual que yo es de los que colecciona películas, y en mi caso soy de los tontos que las siguen comprando, me gusta tenerlas en físico. Con respecto a mi abuelo, debo decir que yo fui el que lo metió en lo que es el cine.
- ¿Cómo así?
- Él antes pensaba que estar viendo una película era una pérdida de tiempo. Ahora por lo menos ve una al día, hablamos sobre ellas y me pide que le recomiende películas. Incluso hay veces en que me llama y me reclama porque no le gustó una de Tarantino, por ejemplo, que le recomendé.
- ¿En tu familia te apoyaron con lo de ser cineasta o querían que estudiaras una carrera más tradicional?
- En realidad hay poco de común en ese sentido en mi familia, pero por ejemplo mi mamá (Vivi), siempre me apoyó, pero como sabe lo que es este mundo, me dijo que tenía que sacarme la mugre para lograr lo que quisiera.
- ¿Te ha pesado o ayudado el legado familiar?
- No sé si pesado, pero tampoco ayudado. Se puede pensar que por ser el “nieto de” se te van a abrir las puertas, pero yo prefiero rascarme con mis propias uñas.
- ¿Cómo paras la olla?
- En la universidad tuvimos que crear una productora desde cero para hacer una película. Ahí yo tomé el papel de productor y con otros dos compañeros lo armamos. Cuando salimos quisimos seguir con este proyecto y no tener que servirle el café a nadie, y si nos iba mal habría que hacerlo, pero por suerte nos fue bien. Se llama ‘Colorín Buenasuerte’.
- Saliendo un poco de ahí, ¿soltero, casado?
- Pololeando hace dos años.
- ¿Comida favorita?
- Hay bastante, pero me quedo con las hamburguesas.
- ¿Fanático de algún equipo?
- Por supuesto, colocolino 100% y muy feliz por lo demás después del clásico.
- Pa’l güergüero, ¿pilsen, piscola, whisky, vodka o nada?
- Cerveza y whiskey.
- ¿Género de cine y director favorito?
- Suspenso, y los directores Hitchcock y Fincher.
- ¿Alguna musa soñada para uno de sus pelis?
- Marion Cotillard y Natalie Portman.
- ¿Algo más en el futuro?
- Quiero ir a Estados Unidos a perfeccionarme en mi rubro.
- Ahora que estás en pantalla, ¿te crees el cuento?
- En ese sentido debo decir que no me gusta figurar, prefiero pasar tranquilo. Fue fortuito de cierta forma que pasara al frente de la cámara por la relación familiar con mi abuelo, pero llegará hasta ahí nomás.
