Hace tres años que el hombre que le dio vida al “Profesor Rossa”, Iván Arenas, comenzó a sacarle filo a los chistes subidos de tono, y ahora que se presentará el próximo viernes 11 de diciembre en los premios “Copihue de Oro”, asegura que si la barra se lo pide, se lanzará con tutti nomás, mieeerrr.
“El ‘Copihue’ va a ser una instancia muy divertida, porque la gente por lo general cuando me subo al escenario comienza a gritar ¡Sin Censura!, así que tendré que hacer caso”, verseó el maestro del chiste largo sin que nadie lo apretara.
- ¿Cómo se viene la rutina, para dónde se va a cargar?
- A lo mejor de mi repertorio, jajajá. Vamos a estar frente a los medios de comunicación, así que hay que guardarse un poquito eso sí.
- Pero con su carrete, tiene que tener un batallón de infantería de chistes, ¿Onofre?
- Claro, hay chistes que se pueden contar, que tienen un poco de todo y que no necesariamente terminan con una grosería soberbia. Voy a estar entre 15 a 20 minutos, donde podría contar solo uno, pero voy a tratar de cortarlos, cosa de tener uno de línea media, uno cortito, y uno un poco más largo, y así.
- Esos le gustan a su público...
- Es que a la gente le gustan porque tienen varios chistes segmentados.
- ¿Se mandará alguno de grueso calibre?
- Eso hay que verlo en el momento, eso te lo da el público. Si las aguas están para algo fuerte fuerte, bien, pero como va a salir en medios de comunicación, ojalá que la crítica no sea muy destructiva.
- ¿Y si su barra se lo implora?
- Hay que verlo arriba, depende del comportamiento de la gente, es lo que me pasa en todas partes, además que voy a estar frente a mucha gente y sobre todo damas, por lo que hay que pedir permiso primero, por respeto.
- ¿Siente que la prensa lo podría castigar?
- En ningún momento me han cuestionado, la prensa no me reventó en su momento, e incluso hay algunos críticos que dijeron qué bueno que se haya realizado este giro, hablaron bien, así que agradecido.
- Tiene que puro tirar todo a la parrilla entonces...
- Parece que si.Todo.
