De jugoso Kike se ensañó con Roxana

Aviso de utilidad pública: Por favor, que alguien le diga al Kike Acuña que deje de dar jugo. Me van a creer que la madrugada del 14 de febrero llegó arriba del balón a su depa y se topo con Mario Brisso y su señora, Roxi Muñoz, quienes animadamente disfrutaban de unos buenos combinados. Ahí se desató la furia del futbolista, que terminó con los protagonistas de esta historia moreteados.

Mario Brisso es el mánager y yunta de Roxana Muñoz. La noche del lunes se juntaron para copuchar y ponerse al día. La Roxy, que está casada desde el 30 de enero con el dolape, invitó a su sociate al departamento que comparte con el deportista ubicado en la calle Manuel Montt 572, comuna de Providencia.

A eso de la una de la mañana el calvo hizo su entrada al hogar. Dicen que iba bien enfiestado. Así lo registra el parte de Carabineros al que La Cuarta tuvo acceso. El cuento es que cerca de las dos de la mañana la modelo llamó a la fuerza pública para que le ayudaran a parar el escándalo que tenía su marido, con el que recién lleva 15 días de casada. Flor de romance.

Resulta que entre la una y las dos de la mañana el temperamental marido de Roxi empezó a agarrar a xuxadas a su mujer y compañía, pero el atado se puso color de hormiga cuando Acuña perdió la paciencia y se abalanzó sobre Mario Brisso para sacarle la contumelia. Fue ahí cuando Muñoz se interpuso para defender a su invitado. Sin querer queriendo se metió al medio de una rifa de combos... Y bueno, está claro lo que pasa cuando uno se mete en las patas de los caballos. De paso, el futbolista boxeó al mánager de la ex conejita Playboy.

Cuando llegaron los verdes, el escándalo ya era de proporciones. Tomaron detenido a Acuña, que según el sapeo policial venía "en evidente estado de ebriedad".

El trío maravilla fue llevado por Carabineros a la Posta Central, pero ninguno quiso constatar lesiones, por lo que Kike fue retenido por la autoridad, pero dejado en libertad cerca de las ocho de la mañana de ayer.

LE TENÍA GANAS

Las malas lenguas de siempre contaron que el día sábado, mientras Acuña se concentraba para el partido que su club (San Felipe) debía enfrentar a Universidad Católica, Roxana y Brisso se habrían ido de carrete a Viña, y que el manejador se había dedicado a tuitear todo el mambo, lo que habría molestado profundamente al ex seleccionado.

ATADOS ANTIGUOS

Recordemos que la parejita ya había pospuesto su matri por este mismo tipo de atados. De hecho el lunes de esta semana Kike había tenido un fuerte encontrón con un equipo del cocido farandulero En Portada, donde golpeó a un camarógrafo y amenazó con las penas del infierno a a un notero.

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