Un nuevo y brígido desafío se vivió este domingo en MasterChef. En esta pasada, los aspirantes debían mostrar todas sus habilidades culinarias y lucirse con la gastronomía chilena.
Sin embargo, el cuento no fue taan papita pa'l loro como varios se imaginaban, tanto así que no fueron pocos los que guatearon y dejaron con así la mansa vena a los chef.
Así nomás, cabritos, pues la mayoría de los participantes nacionales no le vieron el ojo a la papa. De hecho, fue brasuca Caio roncó como uno de los mejores platos de la noche con su charquicán. Incluso, al chascón le entró una basurita en los ojos tras conocer la opinión de los jueces.
Sin embargo, el cabro no fue el único que se peinó en el cocido de Canal 13. Claro, pues Josefa también dejó la patá con sus porotos con mazamorra, que la alzó como una de las grandes ganadoras de la noche.