Josefina Montané contó en “Vértigo” el jueves que se había comido, en forma de batido, la placenta resultante del nacimiento de Mila, su segunda hija. “Fue como un shot de energía. Uno pierde mucha sangre con el parto y es una manera de recuperarlo. Todos los mamíferos, los animales se comen su placenta”, aseguró la ahora trigueña debilidad.
La confesión de la actriz a la que se unió Kenita Larraín, dejó la grande en redes sociales. El pajarraco azul aleteaba y aleteaba con la chorrera de tuiteos. La criolla se sumó así a una tendencia que se llama “placentofagia” y que está agarrando fuerza entre las mamis -y algunos papis- y que se hizo conocida cuando Kim Kardashian compartió su experiencia en la web asegurando que combatían la depresión post parto. Antes ya lo habían hecho January Jones (“Mad Men” y “The Last Man On Earth” ), la modelo Holly Madison, Jennifer Lopez y Alicia Silverstone.
Hablamos de esta tendencia con una experta en comportamiento humano, la siquiatra María Luisa Cordero, quien aseguró que esta moda “es cercana a la antropofagia, pero no seamos cínicos ni hipócritas, si esto no tiene nada de malo. No creo que sea una tendencia, yo veo a esta niñita como una pionera, igual cuando lo dijo en el programa me dio cosa, escalofríos cuando dijo que se comió la placenta. Y cuando dijo lo del batido, mmmmmm no sé”.
- ¿Le parece muy raro esto de comerse la placenta?
- No para nada, ahí están los grandes nutrientes de nuestro cuerpo, es ahí donde la guagua está higienizada, en un ambiente esterilizado por nueves meses. Si ella se lo quiere tomar porque su maestro se lo dijo, creo que está bien. Quizás es un poco sectario.
- ¿Cómo?
- Ella y su marido deben pertenecer a cierto tipo de pensamiento, más natural. Pero si no es tan nuevo, no nos sorprendamos tanto. Hace siglos que se ocupan fluidos humanos para fines nutricionales o estéticos, o no sabías que las esposas de Calígula se ponían semen y menstruación en la cara para mantenerse jóvenes.
- ¿Es como una moda?
- Si esto no es moda, son nuevas tendencias, como la recolección de células madres. Mira, no me acuerdo mucho, pero cuando estaba en tercero o cuarto de medicina con mis compañeras hablábamos de cómo la menstruación poseía beneficios y nutrientes.
