¡Ya cabros! Entramos en la cuenta regresiva del reality que la lleva y ya tenemos a los primeros rajuelas que le van a poner sangre, sudor y lágrimas a la gran finalísima.

Cuando les contaron que la barra se había manifestado libremente por sus candidatos que nica podían quedar fuera de la final, al lote que todavía pela el ajo en el encierro de la casona bipolar le cambió el caracho de una. Empezaron a hacer sus apuestas y más de alguno pataleó que la cuestión estaba más arreglada que un rico borgoñita.

Pero les guste o no, y como casi siempre ocurre en este tipo de pomadas, la voz del respetable suena fuerte a la hora de agasajar a los favoritos y de pegarle donde más les duele a los odiosos.

Cuento corto y tras una breve y sencilla ceremonia, llegó el sobre que traía en su interior los nombres y apellidos, no sabemos si el carné, de los afortunados que se anotarían en la recta final Mundos Opuestos.

No hubo redobles de tambores, pero sí se escuchó de fondo música de suspenso que a varios les recordó los Piratas del Caribe. Nos vamos a reservar la informeichon de quienes se tenían más fe que cabra de 15 y terminaron con manso cogote luego de escuchar que por el lado de las féminas, la mijita linda que se ganaba el derecho a participar de la final, sin tener que rendir la prueba para entrar a la Onemi, era Dominique Gallego.

PICOTAS

Donde hubo varios picados fue en el bando de los machotes, ya que había al menos 3 que se sentían dueños del pase directo a la gran competencia de cierre. Pese a lo anterior, el nombre de Roca logró consenso.

Pero lo que nadie se esperaba, ni siquiera los sapos y gritones vecinos del chalé de Pirque, era el manso premio que se llevaría el parcito.

Y afírmense, que la cuestión no es na’ un viaje a dedo a Doñihue ni un vale por un pisco sour ni un tour por el Litoral Central parando a comer un mariscal en Guaylandia, sino que la parejita se pegará un viaje al otro del planeta, ni más ni menos que a China, específicamente a Shangai. Justo donde tengo a mi compadre haciendo patria, ¿qué tal?

El atado es que la Domi se quería llevar a Joche y el Roquita a la Mariana, ya que dicen que por esos lares existe el mítico chinito constructor, que según nos soplaron los cabros que nos traen la comida china al diario, es "muy bueno hachiendo cashitas".

¿Y EL RESTO?

Los que no resultaron favorecidos por la votación de la barra se tendrán que chupar el dedo y sacarse la miércale compitiendo por ser semifinalistas y posteriormente finalistas del reality que busca al gran ganador, antes de que se acabe el mundo.