"La verdad que era difícil darse cuenta que tenía 17 años", decía Kike Morandé mientras intentaba explicar la aparición de una pequeña María José López en el MCC, cuando todavía era menor de edad. Claro, la chiquilla siempre lució ricarda y sus performances en el estelar de Mega hacían explotar el rating, pero nadie sospechaba que la cabra todavía era una nena.
Por ese entonces, la Coté armaba polémicas con Marlene Olivari, a quien le pidió que "colgara el colaless" porque "su tiempo ya había pasado". La idea era meterse de cabeza a Farandulandia, pero lo que la chiquilla no sabía era que con su puro cuerpazo podía llegar lejos, ya que todos los jotes sintonizaban los programas donde aparecía para cuartear sus curvas y carita angelical.
Después la chicuela se llenó de cahuines, pelambres, tongos y hasta un supuesto episodio de infidelidad a Luis Jiménez con Mauricio Pinilla, donde hasta el drama del pobre león Simba salió al ruedo. Hasta ahí todo bien, pero fue de un momento a otro cuando la lindura volvió al país transformada en una persona completamente distinta.
Al parecer, el "Mago" no tuvo dramas en prestar la Master Plop para que su señora se enchulara en el quirófano las veces que quisiera. Su nueva pinta generó ene críticas en los distintos paneles de la tevé a color, donde muchos se preguntaban por qué diablos la mozuela se metió tanta tijera teniendo facciones tan lindas.
Su última aparición en Chile fue registrada en el aeropuerto de Santiago este fin de semana, y la cabra luce completamente distinta a como irrumpió en la pantalla, en 2004. Juzgue usted mismo.