El pasado 8 de febrero marcó un antes y un después para Jorge González. Luego de realizar un show en la ciudad de Nacimiento, al músico se le apagó la tele y, tras un par de horas de no cachar qué onda, los doctores le diagnosticaron un brígido infarto cerebrovascular, que lo tiene hasta el día hoy con riesgo vital.
Así al menos sapearon los ágiles de La Tercera, quienes contaron en colores el cototo proceso de rehabilitación que vive la ex voz de Los Prisioneros, a quien en su momento le dijeron sin asco que le quedaban sólo seis meses de vida. ¡Brígido!
"Fue un terremoto para todos. Fue grave y su vida estuvo en riesgo, pero hoy todo apunta a que, gracias a su actual tratamiento y, sobre todo, gracias a su actitud y su empeño, su estado puede ir presentando grandes mejorías", reveló Alfonso Carbone, mánager y yunta del artista.
Afortunadamente para sus seguidores, con el correr de los meses el sanmiguelino fue respondiendo al tratamiento y por estos días el pronóstico es mucho más alentador que al comienzo, aunque su futuro todavía es incierto.
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A pesar de que sus dramas de salud lo tuvieron con el ánimo por el suelo, González no quiere perder el gallito y lucha por mejorar día a día.
De hecho, se juramentó que pisará aunque sea una vez más los escenarios, sueño que podría transformarse en realidad el próximo 27 de noviembre.
Eso sí, se trataría de un show de no más de tres canciones, y en el que participarían otros artistas que se dejarían caer pa' hacerle un queque pór su exitosa trayectoria.
