Desde que su salud ha estado malena, Juanga estaría con depre y sin ganas de seguir viviendo, sumado a que ya tiene planeado su funeral y sepultura en el fondo del mar. Así lo sapeó para la revista "Tv y Novelas" de México, Daniel Aquino, doctor personal del charro.
Siguiendo una nueva tendencia gringa, le habría pedido a una empresa especializada en el cuento, que lo pongan en una lápida cerquita de los peces.
"Él ama tanto a México que quiere que sus cenizas queden en Cancún y Acapulco", soltó el doc.