"En pelotón hay un montón de cámaras para hacerlo"

Apenas se supo que Manuel Neira se reclutaría en "Pelotón", no faltó el chistosito que pensó que iba a llevar su celulítico para grabar sus particulares "ejercicios manuales"...

"¡Para qué lo voy a necesitar, si hay un montón de cámaras para hacerlo y dedicársela a todos los que me molestaron... jajajá!", bromea el ex goleador albo.

Y es ese sentido del humor el que pretende explotar dentro del reality de TVN, "porque no entro a buscar fama, pues no la necesito, ni mujeres, ya que estoy comprometido", asegura.

Luego agrega que "jamás me imaginé que entraría a un programa así, pero lo tomo como una opción laboral (se habla de un sueldo de 4 a 6 millones de pesos mensuales), pues quedé imposibilitado de jugar este año, porque ya lo había hecho en La Serena y en la Universidad Católica de Ecuador (no se puede fichar por más de 3 clubes en 12 meses)".

De hecho, el hombrón asevera que no "haré eventos discotequeros ni nada parecido una vez que salga de la base, pues quiero volver al fútbol que es mi pasión y retirarme dentro de dos años en Unión Española o Colo Colo".

El problema es que su vida tendrá un antes y un después de que su comportamiento salga "editado" por las pantallas de la estación pública, algo que pareciera tener sin cuidado al futbolista.

"Tengo claro como funcionan los realities, pero no me preocupa puesto que no soy una mala persona, ni soy un 'mala leche'. Todo lo contrario, soy amistoso, buen hijo, buen padre y un gran amigo... Creo que mi papel será ser el gurú de los demás... jajajá", detalla.

Claro que hay un factor que no podrá controlar, por más que se porte bien en el espacio conducido por Rafael Araneda y Karen Doggenweiler: La lengua de su ex pareja Pamela Díaz.

"Ella tiene su trabajo y lo hace muy bien y más allá de que nuestro matrimonio fuera transmitido por 'Primer Plano', nunca ventilamos nuestra vida privada ni hemos hablado de nuestra separación", señala.

Por lo mismo, no cree que "La Fiera" comente algo más que su desempeño, "pues tenemos una linda amistad, un gran cariño por nuestros hijos (Trinidad y Mateo) y ella es inteligente y no caerá en el juego de algunos medios de comunicación que sólo quieren hacer daño", concluye.

Los quince reclutas que darán jugo en el nuevo encierro en Calera de Tango tendrán que bailar el ocho en las barracas. El próximo jueves harán ingreso a la base-estudio, la cual sufrió algunas remodelaciones para acoger de mejor manera a los reclutas y dar espacio a las pruebas en onda nipona.

Si bien el contingente seguirá usando diariamente la vestimenta de camuflaje, para los momentos más importantes la producción decidió que se envuelvan en un kimono.

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