ORLANDO.- Mientras su chancletita paga las culpas haciendo aseo en una morgue gringa, Michael Lohan, papi de Lindsay, fue arrestado por segunda vez en Florida, en Estados Unidos, pocas horas después de quedar en libertad bajo fianza tras ser acusado de agredir a su pierna, Kate Major, de 28 años.
El dramón comenzó en la madrugada, cuando la novia del caballero alertó a la policía de Tampa que estaba recibiendo llamadas a su casa en las que el padre de la condorienta actriz supuestamente la acosaba. "Mientras la policía se encontraba en el lugar de los hechos, Lohan llamó otra vez y pudimos escucharle al teléfono", aseguró la policía.
Con los antecedentes a la vista, la fuerza pública solicitó entonces a la Fiscalía del condado de Hillsborough que emitiera una orden de arresto contra Lohan, de 51 años, por violación de la orden de alejamiento y, una vez concedida, procedieron a su detención.
EN OTRA
Mientras don Michael lo pasa como el ajo, Lindsay negocia su participación en una edición de la revista para teteritas de campo Playboy, donde espera cortar una cifra cercana al palo verde (ver nota relacionada).