Además de estar en el escudo nacional y ser un animalito tiyible lindo, el Huemul le da el nombre a una plaza, población y teatro del Gran Santiago.
Inserto en el barrio Franklin, el "Teatro Huemul" emerge como un recuerdo del Chago del siglo pasado, de construcciones de cemento y arquitectura inglesa, que cada día desaparece un poco más devorado por los grandes edificios que abundan en el centro de la capital.
Fue construido con motivo del centenario de la República entre 1914 y 1917, y surgió junto al barrio del mismo nombre, que además de la sala de espectáculos, incluyó dentro de su diseño una iglesia y una escuela.
Como para esos tiempos la población estaba súper alejada del centro, se transformó en la primera ciudad satélite del país. Pa' que cache la onda.
En su época de esplendor, en el teatro cantó Gardel, pero el de verdura, no el que llega a fin de mes. Al menos así nos contaron los vecinos del sector.
Dentro de sus instalaciones también se han grabado escenas de películas pulentas de nuestro cine criollo, como “Coronación” y “No”.
Pese a los dos terremotos que lo han azotado, el "Huemul" está casi igual que hace 100 años, y aunque está medio botella, hay varias iniciativas por transformarlo nuevamente en un gran escenario para la cultura.
"Es cosa de mirarlo no más para que den ganas de recuperarlo", opinó la morenaza Alexandra Contreras, que con sólo 19 pepitas posó para ESP frente al mítico recinto, en la tradicional Plaza Huemul.
"Es lo más lindo del barrio Franklin y se mantiene antiguo, pese a que la modernidad ha avanzado por la ciudad", filosofó la ricura de curvas peligrosas.
La chiquilla, que es pura hermosura, trabaja como modelo y promotora y su fuerte son los shows de discos. Lo fome es que, por ahora, tiene pareja.