Con la pera en el suelo quedaron los millones seguidores de la actriz Uma Thurman tras ver los resultados de la última operación estética a la que se sometió la rubia debilidad.
La chiquilla, de 44 años, quiso enchularse la cara y quitarse arrugas, pero algo salió mal y perdió como en la guerra. Uma llegó con su mejor pinta a la alfombra roja de la serie The Slap, (su nueva pega) y de inmediato se robó la atención y no por su belleza, sino por su irreconocible caracho.
Su frente no tenía patas de gallos y sus ojitos lucían claramente más estirados, y no por trabajo de un maquillador experto. Lo peor de todo, es que en reiteradas oportunidades, Thurman se declaró contraria a los enchulamientos artificiales.
Cabe señalar que la ex pareja de Tarantino no es la primera famosa que se somete a una cirugía estética y termina como momia. Renee Zellweger, Demi Moore y Florinda Meza también nos dejaron con pánico tras sus retoques.