Con apenas 22 añitos, la exquisita Charlotte Mckinney es objetivo permanente de los camotes faranduleros de Gringolandia. Sobre todo ahora que divide su tiempo en dos temas de interés mediático: una bullada relación amorosa y el pituto en el remake de ''Guardianes de la Bahía''.
En esa volada, la diosa que saltó a la fama tras zamparse la mansa hamburguesa en un recordado comercial del ''Super Bowl'', fue sorprendida por el lente metiche de un paparazzi a la salida de un restaurante. Por siaca, y aunque a nadie le importó, iba acompañada de su pierna peluda.
Revisa en detalle el sapeo a la belleza...