Se le ha visto en cuanto cahuín ha estado dando vueltas en Farandulandia, el otro día hasta le echaron la talla por meter su cuchara en todo lo que le preguntan, pero ahora Sandy Boquita está pescando otro rumbo, uno que "desde muy chiquita ha sido lo que siempre he querido y soñado".
Por si no ha parado la paila, ella en conjunto con un póker de ricuras y el siempre delirante Benni, se están presentando en shows de revista en que la bife chorizo las hace de vedette. "Recuerdo que una vez se lo dije a mamá, que siempre me aplaudía en mi casa cuando cantaba y bailaba", saca pecho la rucia.
- ¿Desde péndex que vienes persiguiendo el sueño de ser vedette?
- Sí, incluso en una ocasión en Argentina, cuando no tenía nada que ver con el mundo de la farándula, hice unas fotos para un diario, y me preguntaron qué me gustaría ser, y yo dije que vedette.
- Pero pa’ eso se necesita mucha técnica, ¿ya la tiene, mijita?
- En eso estamos. Estoy practicando mucho todos los días, ya sea tanto coreografías como caño, y aprender a llevar los trajes, que son pesadísimos.
- ¿Y las está haciendo todas, o hay cosas que faltan?
- Faltan algunas. Por ejemplo, ya puedo hacer la silla, que es cuando te levantan desde las pompas.
- ¿No le da julepe que la tomen por la retaguardia?
- Para nada, porque mis bailarines son muy profesionales. Eso sí, al principio me deba cosa cuando hacíamos esa figura, porque sentía que me iba a caer... ¡si hasta se me salían unos gritos! Pero bueno, ahora sigo progresando y aprendiendo nuevas técnicas.
- ¿Alguna que sea una verdadera proeza lograr?
- Sí, hay una que aún no puedo hacer, que es de estar sujetada con las piernas abiertas, demanda mucho esfuerzo.
- ¿Cree que en algún momento va a ser capi?
- Con esfuerzo y dedicación todo se puede, además que me tengo que aplicar porque partí tarde en esto.
