Los peores días de su vida está pasando la pechocha Francini Amaral y no es para menos, ya que la garotiña se acaba de enterar que a su viejo le detectaron un cáncer, por lo que tuvo que agarrar sus maletas y viajar de urgencia a Brasil.
Las alarmas de que algo no andaba bien en la vida de la bailarina y ex recluta de Pelotón se encendieron el miércoles, después del triunfo de Chile ante Uruguay. Esa noche, la garotiña solicitó a sus seguidores en Twitter realizar una cadena de oración por su viejo.
"Les pido con todo mi corazón que hagan una cadena de oración a mi papá. Le diagnosticaron cáncer y lo operan el viernes. Mañana (hoy) estaré con él", publicó.
Sobre su regreso a Chile, añadió que "no sé cuándo volveré, tengo que apoyar a mi familia porque las cosas no están bien". Eso fue lo último que tuiteó antes de partir, destacando que su madre necesitaba de todo su apoyo.
Para tener impresiones de ella respecto a los difíciles momentos que está viviendo, nos contactamos con Francini, quien se limitó a señalar que "ahora no te puedo hablar. Estoy muy ocupada, gracias por la preocupación".
Este año ha sido particularmente complicado para Francini Amaral. Si hacemos memoria, recordaremos que, tras ser eliminada a fines de 2009 de Pelotón, se puso a pololear con Óscar Garcés.
El romance iba viento en popa, pero al galán se lo acusó de un supuesto acoso sexual, por lo que la chiquilla optó por ponerle candado a la relación.
Si bien a los pocos meses volvieron, a fines de junio Garcés le hizo pebre el toco Nissan modelo Tiida que la garotiña había adquirido con mucho esfuerzo tras su paso por el reality militar.
El tortazo no pasó piola, pues el galancete chocó con un vehículo que era conducido por Manolete Neira.
Cuando todo parecía calmarse en la vida de Amaral, le propusieron integrarse al elenco de Fiebre de Baile.
La bailarina obtuvo un buen desempeño, pero se la sufrió toda cuando relegó al segundo puesto a su amigui y compatriota, Vivi Rodrigues.